El Instituto Aragonés de la Mujer (IAM) se comprometió ayer a trabajar y destinar recursos para el protocolo de las víctimas de la trata y su gerente, Natalia Salvo, pidió, en su comparecencia en las Cortes, una Ley nacional contra la explotación sexual.

Salvo recordó que la trata de seres humanos «es la tercera fuente ilegal de ingresos a nivel mundial» y «una forma de esclavitud del siglo XXI, en la que un 90% son mujeres y niñas, mientras que el 50% son menores de edad», afirmó.

Del mismo modo, la gerente señaló que la DGA adquirió el compromiso en la prevención de esta lacra «consientes de la importancia de este problema». Sobre el protocolo, Salvo indicó que «va a permitir una mejor coordinación entre instituciones», ya que para la elaboración del mismo han trabajado las fuerzas de seguridad, otros departamentos o las oenegés en este ámbito, apuntó.