EL CEMENTERIO de Torrero se convirtió ayer en el escenario elegido para conmemorar el día de la Madre. El Ayuntamiento de Zaragoza organizó un concierto gratuíto detrás de la Cruz de los Caídos. El grupo folklórico La Fiera se encargó de rendir un homenaje a través de la jota a todas las madres, mediante coplas cantadas y bailadas, que recordaron su papel fundamental en la vida familiar.