Las medidas introducidas en los últimos diez meses en el funcionamiento de las instalaciones deportivas han dado ya como resultado el ahorro de "cerca de un millón de euros" en los costes de explotación. Se ha ajustado al máximo el gasto y adoptado medidas como el cierre de algunos pabellones en días de escasa afluencia, reducción de horarios, o ahorro en el consumo energético de unos equipamientos que cada año generan al ayuntamiento un déficit de más de 25 millones de euros.