Al consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, se le borró ayer la sonrisa. Lo consiguió la diputada de Podemos Violeta Barba que lo llamó "cínico" a cuenta de las tensas relaciones entre Gobierno y Ayuntamiento de Zaragoza. Las Cortes aprobaron el decreto-ley que habilita un crédito extraordinario, con cargo al presupuesto del 2015, para abonar 14,85 millones de euros al consistorio correspondientes al convenio para la financiación de la línea 1 del tranvía. El Ejecutivo da por zanjado el asunto, y pese a que quedan por pagar 25 millones --del PP--, todo apunta a que no habrá nuevos abonos.

Las relaciones entre DGA y consistorio siguen siendo foco de tensión entre PSOE y Podemos, y ayer se evidenció de nuevo. En una intervención dura y brillante, Violeta Barba le sacó los colores a Gimeno al recordarle su pasada etapa como vicealcalde. "Qué menos que pedirle que defienda lo mismo aquí que en el ayuntamiento, donde estaba hace solo 8 meses", dijo. Por ello le exigió que pague no solo los 14,8 correspondientes al 2015, sino los 25 que hasta hace bien poco reclamaba al anterior Ejecutivo autonómico de Luisa Fernanda Rudi.

Minutos antes Gimeno se había presentado como salvador del ayuntamiento. Con el pago de los 14,8 millones se evita "el problema del posible preconcurso de acreedores" de la sociedad Los Tranvía de Zaragoza. Aunque no le faltaba razón al consejero cuando señaló que su departamento había resuelto el abono de una anualidad del convenio después de tres año de parón. Y lanzó un mensaje al alcalde Pedro Santisteve: "Debe ser consciente de las limitaciones".

FUTURO

Una forma de decir que podría no haber nuevos pagos. El Gobierno ha hecho ya sus cálculos. Y da el convenio por pagado porque las obras del tranvía costaron menos de los previsto. Está por ver la reacción del consistorio. De momento, Barba le recordó los saldos económicos que dejó en el consistorio como máximo responsable de la hacienda de la ciudad. "Si hubiera algo en lo que Zaragoza debiera dejarse ayudar sería para salir de los problemas que usted mismo ha causado y que está sufriendo el actual gobierno municipal", señaló. Y detalló un buen número de partidas presupuestadas por Gimeno y que resultado insuficientes.

Pero al consejero no solo le llovieron las críticas de Podemos. El PP, que dejó sin pagar 25 millones --de los años 2013, 2014 y 2015--, tildó a Gimeno de "impresentable". El portavoz conservador, Antonio Suárez, intentó justificar la deuda que dejó el Ejecutivo del que él mismo formaba parte. El pasado parecía perseguir ayer a unos y otros. Pero el popular se apresuró a poner en duda el proyecto del tranvía y el convenio firmado para salvar la gestión del anterior Consejo de Gobierno en él se sentaba.

Elena Allué, cuyo partido, el PAR, estuvo en la firma del convenio allá por el 2009 cuando Gobernaba con el PSOE, dudó --ahora-- de la sostenibilidad del servicio del tranvía, por sus "elevadísimos costes", que se sabrán cuando se conozca la liquidación definitiva del proyecto. Javier Martínez (C's) se interesó por el origen del dinero que ahora se paga al consistorio.