No habrá copago en Aragón siempre y cuando el Ministerio de Sanidad no decida lo contrario. Así de firme se mostró el director gerente del Servicio Aragonés de Salud, Tomás Tenza, durante su comparecencia ante la Comisión de Sanidad, Bienestar Social y Familia. Una intervención, solicitada por el consejero Ricardo Oliván, en la que el gerente del Salud presentó sus 400 medidas para mejorar la gestión y la calidad de la sanidad aragonesa a los grupos parlamentarios.
"Si el Gobierno central ordena otra cosa, será otro asunto", explicó Tenza durante su primera locución, antes de dar paso a los tres grupos presentes en la comisión. El gerente recordó que la intención del Salud no es buscar la financiación directa del usuario. Eso sí, se llevarán a cabo otras medidas que sí son del agrado del departamento, como la factura sombra para concienciar al usuario del coste del servicio.
Tenza presentó las medidas en cuatro ejes fundamentales: la adecuación estructural, la sostenibilidad, la excelencia y la inversión. "El objetivo es lograr un déficit 0 y que la tendencia se mantenga". Del mismo modo, mostró su deseo de que la sanidad aragonesa vuelva a ser un referente, ya que "cuenta con buenos médicos e infraestructuras". Para ello, "haremos pequeños recortes en el sistema... Perdón, pequeñas adaptaciones, no recortes", rectificó, ante las risas de la diputada de IU, Patricia Luquin.
Fue precisamente esta última quien inició el turno de réplicas. "Desde IU creemos que hay un ataque soterrado a la sanidad pública", explicó Luquin, tras reivindicar el fin social y no económico del sistema. La diputada criticó el escueto tiempo destinado a la intervención de Tenza, a su juicio muy importante.
Desde el grupo socialista también se lamentaron de la escasa amplitud de la comparecencia y propuestas de Tenza en la comisión. "Este documento lo firmaría cualquier trabajador del Salud, no tiene aristas, no profundiza", indicó el diputado Eduardo Alonso, "queremos seguir trabajando desde una oposición leal, pero queremos información".
Finalmente, en el turno del PP, mediante, Marian Orós: "A mí sí me ha servido para tener información", explicó al inicio de su intervención, respondiendo tanto a Luquin como a Alonso. Orós resaltó la necesidad de realizar campañas ed concienciación y de implementar la factura sombra "para que profesional y paciente sepan qué cuesta qué".
