El consejero de Presidencia del Gobierno de Aragón, Vicente Guillén, ha asegurado hoy que la ley de capitalidad de Zaragoza está prácticamente terminada pero no se termina de cerrar porque el ayuntamiento de la ciudad lo condiciona al pago por parte del ejecutivo de la deuda del tranvía.

En declaraciones a los medios tras el consejo de gobierno, Guillén ha insistido en que la ley está "prácticamente hecha" tras más de veinte reuniones entre técnicos de las dos administraciones y a su juicio no es "muy razonable" que el ayuntamiento exija para cerrarla algo que "en nada afecta al contenido de la ley".

"Sé que abro una polémica", ha dicho Guillén, pero lo que no quiere es le puedan acusar de incumplir su palabra de tenerla lista para presentarla este mes en las Cortes y ya no depende de él, sino del presidente del Gobierno, Javier Lambán, y del alcalde, Pedro Santisteve.

Ha reiterado que la ley está pactada en el 99 por ciento y que el ayuntamiento, para cerrarla, no debe unirla a otras cuestiones que se dirimen en el ámbito del Gobierno de Aragón pero en "nada afectan al contenido de esa ley".