l consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, ha defendido hoy ante las críticas de Podemos y de PAR los avances que se están dando en Sarga en torno al operativo de prevención y extinción de incendios, así como en los cambios en la gestión de la empresa pública.

En primer lugar, el diputado de Podemos Andoni Corrales ha vuelto a presentar una interpelación en el Pleno de las Cortes sobre las condiciones laborales de los bomberos forestales de Aragón.

A este respecto, ha denunciado que el Gobierno PSOE-CHA no ha cumplido el acuerdo firmado en este ámbito para la aprobación de los presupuestos, a lo que ha añadido, tras proclamar que "ya de gilipollas tenemos poco", que no habrá nuevas cuentas hasta que no se cumpla lo firmado.

Si algo se ha avanzado, es porque su grupo político ha apostado por el medio ambiente, no porque haya voluntad de cambio, ha agregado.

Ha denunciado que, de 800 bomberos, solo hay unas 50 mujeres y que incluso se han producido casos de agresión sin que la empresa haya hecho nada.

También que a algunos se les manda a los incendios sin "un minuto" de formación o que en los puestos de vigilancia hay trabajadores que han llegado a soportar más de 50 grados y a sufrir quemaduras.

"Se nos acabó la paciencia y el tiempo. Nos vemos en las calles", ha sentenciado Corrales.

Olona, por su parte, ha expresado su preocupación por la limitación de la política forestal a un interés "absolutamente legítimo", pero particular.

Ha asegurado que no va a responder por incumplimientos que todavía no se han producido y que no lo hará hasta final de año, que es cuando acaba el plazo.

No obstante, ha señalado que el presupuesto de las cuadrillas forestales ha aumentado un 88 por ciento desde 2015, o que entre enero y abril se ha incrementado la contratación en un 130 por ciento.

Del mismo modo, ha afirmado que la nómina de los operarios especialistas asciende a 1.862 euros brutos mensuales y la de los jefes de cuadrilla, a 2.075, mientras que los trabajos de prevención afectaron a más de 4.500 hectáreas en 2017 y superarán las 5.000 este año.

Durante su intervención, el consejero ha recibido reproches y abucheos por parte de más de una decena de bomberos forestales desde la tribuna de invitados, obligando a la presidenta de la Cámara a llamar al orden en varias ocasiones.

Por otro lado, la parlamentaria del PAR Lucía Guillén ha coincidido en que Olona no está cumpliendo los acuerdos en materia de prevención y extinción de incendios, pero ha centrado su interpelación en el futuro de Sarga.

Así, ha mostrado su preocupación por que esté tratando de "desmantelar" la empresa pública y por que no se realizan trabajos que sí se hacían anteriormente, por ejemplo con las comunidades de regantes.

"Está llevando a Sarga a hacer pequeñas ñapas", ha denunciado, y ha reclamado transparencia, claridad y que no se engañe a los profesionales, que se están marchando de la empresa pública "por goteo".

Olona ha rechazado las acusaciones y ha reiterado que es "absolutamente falso" que haya ninguna intención de desmantelar Sarga.

Todo lo contrario: "Sarga era un desastre y hoy es una empresa solvente y con futuro", ha remachado.

Ha subrayado que su objetivo era poner a esta empresa al servicio de la Administración y no al revés, lo que cree que está en el origen de las quejas, que son el "ruido" que originan estos cambios.

"Esos cambios a algunos trabajadores les molestan porque ven muy equivocadamente amenazados sus intereses laborales y profesionales", ha añadido.

Por último, el consejero ha reivindicado que están cumpliendo también con exigencias del sector ganadero disminuyendo el precio de la retirada de cadáveres de 0,23 a 0,16 euros el kilo para favorecer la competitividad, así como mejoras en materia de bioseguridad con una mayor colaboración de los servicios veterinarios con los de retirada.

Asimismo, ha explicado que las auditorías han recomendado que Sarga no participe en la redacción de obras en favor de beneficiarios como las comunidades de regantes.