Más de veinte artistas actuarán en el Festival PolifoniK Sound de Barbastro, una cita con la música 'indie' que este año se convierte también en gastronómica, que implica a todo el territorio y que se prepara ya para la llegada de 1.600 personas a partir de mañana.

Cerca de sesenta profesionales trabajan estos días para montar los escenarios del recinto ferial de Barbastro, que acogerá parte del festival que se celebra el 22 y 23 de junio. Son días intensos, en los que se ha trabajado a destajo para tenerlo todo a punto, explica a Efe el director del festival, Iván Arana, quien ultima todos los preparativos.

Las expectativas son positivas dado el buen ritmo al que se han vendido las entradas. La organización espera mantener las cifras récord del año pasado, que supusieron un salto importante respecto a las ediciones anteriores.

Así, prevén que cada día acudan al festival entre 1.600 y 1.800 personas, lo que supondría rozar el aforo, que es de 1.900.

Para Arana, estos datos reflejan que el festival, que celebra su undécima edición, se ha consolidado dentro del calendario musical de verano, en el que existe una amplia oferta con eventos más potentes a nivel nacional. Pero este tipo de festival, en la capital de la comarca del Somontano, con más de 16.000 habitantes, tiene también su público.

Sobre todo, por el cartel de artistas que actuarán en tan solo dos días en sus escenarios. Más de veinte músicos, entre los que se encuentran los irlandeses Delorentos, Carlos Sadness o Pecker, quienes abrirán el festival este viernes, 22 de junio.

El sábado será el turno de Rufus T. Firefly, La Casa Azul, La Habitación Roja, Floridablanca o Carmen Boza, entre otros, que actuarán en los dos escenarios del recinto ferial desde las 18.30 horas.

Antes, al mediodía, unos pocos podrán disfrutar de un concierto en acústico de Anni B Sweet en la Bodega El grillo y la luna. Al mismo tiempo, a partir de las 13 horas, el paseo del Coso de Barbastro acogerá la terraza Turmeón, con la música del DJ Julio Ródenas, quien dirige un programa en Radio 3.

Desde la organización, destacan que esta edición ha implicado a toda la comarca. No es para menos, ya que el evento generará un importante impacto económico en la zona, y por ello, Arana explica que esta vez se ha buscado involucrar tanto al comercio como a la hostelería.

Así, se ha diseñado una ruta gastronómica en la que participan 21 establecimientos. Cada uno de ellos ofrece por un módico precio (3 euros) una bebida y una tapa, que lleva el nombre de uno de los grupos.

"Coincide el número de artistas con el número de restaurante y bares, así que hemos hecho ese maridaje de música y gastronomía", señala.

En tierra de viñedos, el vino tiene también un protagonismo especial en esta edición de festival. Por primera vez, se van a realizar microcatas en el Museo Diócesano de Barbastro, para aquellos que hayan comprado su abono con esta oferta patrocinado por la Ruta del Vino y Somontano.

En resumen, una cita que marida la música independiente con la gastronomía local. Con esto, y con las previsiones del tiempo que anuncian sol, el éxito del festival, un año más, parece asegurado, recalca Arana.