El grupo del PP y el de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Zaragoza han logrado que salga adelante la moción presentada por los populares para retirar la subvención de 2.000 euros concedida a la Semana Cultural del barrio de la Magdalena en los presupuestos participativos del distrito casco histórico.

El motivo de la iniciativa, debatida en la sesión plenaria de hoy, estaba motivada por el respaldo demostrado por los organizadores al denominado Guillotina Fest que se promocionó con un cartel anunciador que, según el PP "contenía elementos alusivos a la violencia, al odio y al rencor social y a la pena de muerte como herramienta legítima para la aniquilación del adversario político".

En el cartel aparecían en un cesto la cabeza del rey emérito, Juan Carlos I; el presidente en funciones del Gobierno de España, Mariano Rajoy; el presidente de la CEOE, Juan Rossel, y el cardenal Antonio Cañizares.

Previo al debate han intervenido asociaciones vecinales y entidades culturales del barrio de la Magdalena para defender la semana cultural y las distintas actividades desarrolladas en torno, entre ellas promocionar el comercio del distrito.

Directamente relacionado con el Guillotina Fest ha intervenido la asociación Barrio Verde, desde la que se ha explicado que el cartel se enmarca en la sátira política cuyo objetivo es "entretener y provocar" y ha advertido de que en el caso de que se tratara de delito el PP ya lo habría denunciado.

"Hasta un niño lo identificaría con la sátira. No hay sangre ni signos de violencia", por lo que Barrio Verde cree que el PP ha utilizado las críticas para "debilitar" al Gobierno de Zaragoza en Común.

El concejal del PP Pedro Navarro ha dicho que lo que no comparte es que el cartel "se pague con el dinero político" y ha asegurado que "no es sátira política" sino que es una iniciativa que "ofende, incita a la violencia y al odio social".

"Todos estamos sujetos a la sátira pero esto no es sátira" ha dicho Navarro al señalar que la presidenta de la Asociación es Aránzazu Romero Baigorri, dirigente de Podemos.

El concejal del PSOE Roberto Fernández ha justificado su abstención en la retirada de la subvención por entender que no puede estar en cuestión por una acción unilateral, ha reconocido que "el cardenal más homófobo de la curia" o "que quien dice que los trabajadores en el paro no tienen que tener subvención, algún corte del pelo se merecen" y ha asegurado entenderlo "desde la crítica satírica".

El portavoz de Zaragoza en Común, Alberto Cubero, ha lamentado que este asunto es "lo que le interesa al PP, no la Educación, la Sanidad..." y no les importa "mentir" como hicieron con los titiriteros.

Le ha instado a no hablar "de incitar a la pena de muerte que durante 40 años la practicaron en este país contra los disidentes políticos" y ha anunciado su voto "a favor de la libertad de expresión y la sátira política", al tiempo que ha recordado las veces que se han concentrado en respaldo a la revista satírica francesa Charlie Hebdo, objeto de atentado yihadista, por sus numerosas decapitaciones al profeta Mahoma.

En respuesta, Navarro le ha asegurado sentirse "muy orgulloso" de defender los valores del PP y le ha advertido de no le puede "hablar de respeto ni democracia, cuando usted es secretario general del Partido Comunista" y "paga con dinero público una placa al pistolero Ascaso".

"Lo único que pedimos con esta moción es respeto y que lo paguen con su dinero", ha sentenciado.

La portavoz de Ciudadanos, Sara Fernández, se ha mostrado a favor de la moción porque "hay que ser muy cuidadosos con el dinero público", apoya que en las bases de subvenciones se excluyan las actividades que inciten al odio o a la violencia y ha reconocido que los 2.000 euros de ayuda concedida ha sido "para toda la semana cultural: no se hacen excepciones".

Desde CHA, su portavoz Carmelo Asensio personalmente ha reconocido que el cartel "no es acertado", pero ha cuestionado las acusaciones del PP, "completamente descontestualizado".

Según Asensio, retirar la subvención a una asociación en un barrio como la Magdalena que organiza más de cien actos, "nos parece demasiado severo por un hecho aislado".

Además de la retirada de la subvención, que ha salido adelante con el apoyo del PP y Ciudadanos, la abstención del PSOE y el voto en contra de ZeC y CHA, se ha acordado introducir, con el rechazo de ZeC y CHA, una cláusula por la que será causa de revocación de ayudas la reivindicación, incitación, alegoría o alusión a la violencia y al odio político y social.

Mediante la moción también se pretende regular que las asociaciones y entidades en cuyos actos o anuncio de actos se produzcan este tipo de hechos y no hayan intentado evitarlos al ser detectados, o no demuestren arrepentimiento y denuncia pública en el caso de no haber sido detectados previamente, queden excluidos automáticamente en las siguientes convocatorias de subvenciones, ayudas y presupuestos participativos.