El Gobierno de Aragón, junto a los Ejecutivos autonómicos de Canarias y País Vasco, ha presentado al Ministerio de Sanidad un proyecto que tiene como fin crear una plataforma integral y tecnológica que permita un "uso más racional" de los recursos sanitarios para evitar las saturaciones de los dispositivos de emergencias y urgencias médicas en los hospitales de la comunidad. La solicitud se registró en Madrid el pasado 17 de abril y, según fuentes del Departamento de Sanidad, la resolución definitiva se espera en septiembre.

Su desarrollo en Aragón se estima en 3,4 millones de euros. De ellos, 1,7 millones los obtendría la DGA de fondos europeos y los 1,7 millones restantes los abonaría el Ejecutivo autónomos. En la consejería de Sanidad se muestran "optimistas" con esta iniciativa y si, finalmente, el Gobierno de España da vía libre al proyecto, Aragón obtendría también financiación desde Madrid, hasta llegar a los 7,4 millones --en esta cifra ya estarían incluidos los 3,4 millones--.

El proyecto, inscrito bajo las siglas PEGP (Plataforma para la Evaluación y Gestión de los Pacientes), establecerá un servicio multidispositivo, 24 horas del día, 365 días al año, que permita la elección asistencial "oportuna y disponible" en cada momento desde cualquier dispositivo.

El objetivo es que, contando con información en tiempo real acerca de la disponibilidad de recursos asistenciales, humanos y materiales, se pueda proceder a una mejora del proceso de urgencias médicas. Este tipo de proyectos se están realizando parcialmente en países como Australia y Canadá.

HISTORIAL CLÍNICO

El plan, según el documento presentado al Ministerio de Sanidad y al que ha tenido acceso este diario, empezaría a funcionar desde el momento de triaje en el que el ciudadano acceda al hospital --o incluso antes-- hasta que se le pueda dar el alta o se proceda a su hospitalización.

Entre los argumentos de la DGA para esta integración es que, actualmente, toda la información que se genera en este proceso acerca del paciente "está dispersa y no sólo no se integra, sino que buena parte de ella se pierde". De este modo, todo quedaría registrado en un una Historia Clínica Electrónica (HCE) del paciente.

En Aragón --también en el País Vasco-- existe un enlace al historial de emergencias del paciente, pero no al revés. Es decir, el médico que esté fuera de los centros sanitarios no tiene conexión a la HCE del paciente y, por tanto, no puede estudiar datos que le fueran precisos en ese momento. Así, el registro de actividad clínica, según recoge el documento, "queda cuestionado" en Aragón.

El proyecto en su conjunto, además de mejorar el acceso de los pacientes al sistema, también pretende evitar las duplicidades, los desplazamientos y transportes innecesarios y costosos, tanto desde el punto de vista económico como social. Desde el punto de vista del profesional sanitario, se pretende que disponga del acceso a la información precisa en cada momento y lugar, actuando en consecuencia, de una forma más segura.

PACIENTES CRÓNICOS

Para los pacientes crónicos este plan tendrá "nfasis especial", así lo detalla el documento.

Este tipo de enfermos cuando se agudiza su situación no encuentran "actualmente" el canal adecuado para su tratamiento y no tienen "otro remedio" que acudir a los sistemas de urgencias, lo que provoca saturación. En este caso, su gestión integral en la plataforma propuesta por Aragón, Canarias y País Vasco se haría progresivamente, conforme las comunidades tengan estos pacientes definidos y monitorizados.