El D-Link empató ayer ante el Levante y, virtualmente, dice adiós a su sueño de disputar los playoffs, ya que ante la previsible victoria de Peñíscola ante Prone Lugo, el octavo puesto quedará a diez puntos de distancia a falta de disputarse doce.

El partido arrancó con dos sustos. El D-Link parecía seguir acostado en el parón liguero y el Levante lo aprovechó. Dos zarpazos de Rafa Ara y Carlitos dejaban noqueado al equipo zaragozano. Le costó arrancar a los de Sampedro, que aparecieron muy fríos en el duelo y que se calentó algo con el gol de Caio Alves en el minuto 10. Sin embargo, poco duró la alegría ya que Sena volvía a poner tierra de por medio en el minuto 12. Ahí fue donde el D-Link decidió entrar en el partido y lo hizo a lo grande. En apenas dos minutos Retamar, aprovechando la expulsión de Oviaño, y Verdejo empataron el partido antes del descanso.

En la segunda parte los locales salieron muy enchufados y pronto lograron adelantarse. Caio Alves ponía al D-Link por primera vez por delante pero Borja y Kiko volvieron a darle la vuelta al marcador. En desventaja los de Sampedro sacaron a relucir su calidad y Nano Modrego empataba a cinco. A falta de 57 segundos para el final Modrego parecía asegurar una victoria que Lledó impidió con un tanto sobre la bocina.