Empezó a practicar atletismo siguiendo los pasos de su hermana Lorena en el colegio de Pirineos Sagrado Corazón. Entonces Mireya Arnedillo tenía ocho años. Mañana cumple 14 y qué mejor manera de hacerlo que celebrando su triunfo el domingo en el Campeonato de España de cross cadete de Don Benito. Es un mirlo blanco que ha caído en manos de Jesús Romero, el técnico con el que Isabel Macías ya ganó este titulo un año más tarde que Arnedillo y que con los años llegó a ser campeona de España de 1.500 lisos y alcanzar los Juegos en Londres.

Mireya Arnedillo es un dimante en bruto que todavía hay que pulir. Ella ve su evolución como atleta con cautela y tiene los pies en el suelo. «Lo primero es llevar bien los estudios, porque es de lo que viviré en el futuro, aunque del deporte se puede vivir». Admiradora de Toni Abadía, Carlos Mayo e Isabel Macías, ve los Juegos como un sueño. «Pienso en lo que me pasa ahora y el futuro no se sabe. Pero me gustaría viajar realizando competiciones atléticas», explica la atleta zaragozana del Hinaco Monzón, que estudia segundo de la ESO.

Fue Jesús Romero la que empezó a entrenarla como una más entre los niños que practican atletismo en el colegio del barrio del Actur. «En Pirineos no hay selección y se apunta el que quiere. Cuando la cogí era más bajita y fue en infantil de segundo año donde dio el cambio. Braceaba de otra manera, apoyaba el pie de forma diferente», afirma Jesús Romero.

El técnico solo tiene palabras buenas sobre Mireya. «Tiene ilusión, es trabajadora, tiene ganas y es buena compañera. Tiene muchas ganas, es ambiciosa y quiere destacar. Es muy joven todavía y en la competición se crece y se transforma». explica Romero.

Las dos últimas semanas han sido inolvidables para esta atleta pequeñita, sonriente y con el pelo recogido en dos coletas. Sus triunfos ya se veían venir. Hace dos fines de semana se impuso en el mil del Nacional cadete bajo techo celebrado en Antequera. «Ha sido mi mejor triunfo como atleta. Fue una carrera limpia y siempre fui controlando», explicaba Arnedillo, que batió el récord de los campeonatos con unos espectaculares 2.55.77.

Lo mejor vino una semana más tarde. Fue en Don Benito, donde se proclamó campeona de España de campo a través cadete siendo atleta de primer año. La distancia era de mil metros. No tuvo ningún problema para ganar gracias a su gran velocidad terminal. «En el final me encontré muy bien y con fuerza. Me puse en cabeza en la recta de llegada y gané». Así de fácil, según relata, fue el triunfo para la corredora que se ve en el futuro siendo una especialista de los 1.500 lisos. «El 800 lo veo un poco corto. Será cuestión de probar el 1.500 para arriba», explica.

Mireya regresó de Don Benito satisfecha con sus padres y su hermana y la medalla de oro colgada del cuello. Llegó a su casa a las ocho y media. «Ayer fui al cole a las siete y cuarto de la mañana. Estaba un poco cansada. Pero tenía ganas de ir para ver a mis compañeros, que me han felicitado por el triunfo». Mireya espera que este sueño no se acabe y que en el futuro pueda ser la reina del mediofondo español.