El abatimiento era ayer la nota generalizada entre los jugadores del Real Zaragoza tras la goleada encajada en campo de Osasuna. Todos reconocieron que la derrota había sido merecida y que el Zaragoza había dado una pobre imagen en terreno del equipo navarro. "Hemos sentido mucha impotencia y más por haber perdido contra Osasuna, que es un rival directo nuestro y más con la rivalidad que hay con este equipo. Es algo que siempre vemos cada vez que venimos aquí", dijo Ángel Lafita, quien añadió: "Espero que en el partido de vuelta ellos se encuentren en La Romareda con el mismo ambiente que nosotros hemos tenido aquí".

En el Reyno de Navarra se pudieron escuchar gritos de "Lafita muérete, Lafita muérete", pero el mediapunta aragonés prefirió restarle importancia a esos cánticos. "Solo ofende quien puede y no quien quiere. Todos los años pasa lo mismo en este campo y por eso no le doy importancia", afirmó Ángel Lafita, quien añadió: "Lo peor es que hemos perdido, pero hay que pasar página y pensar ya en el partido contra el Valencia".

JUÁREZ La derrota del Zaragoza empezó a fraguarse en un mal saque de banda realizado por Efraín Juárez, según el árbitro. El balón fue a parar entonces a manos de Osasuna y en el saque posterior llegó el primer tanto del cuadro navarro. "Antes ya me había pitado un mal saque y en el segundo me ha dicho que también lo había hecho mal. Es un error particular, pero hacía mucho tiempo que no se señalaba un mal saque de banda en Primera División", comentó el lateral mexicano. No obstante, Juárez añadió: "Pero no me quiero excusar en eso y asumo mi responsabilidad. Ahora tenemos que levantar la cabeza y tratar de ganar al Valencia. Es una pena, porque el equipo estaba cada vez mejor".