El Mann Filter está a punto de finalizar una temporada que no pasará a la historia. No se clasificó para disputar la Copa de la Reina y no se ha metido en los playoffs por el título. El próximo sábado finalizará la temporada frente al Campus Promete de Logroño a las 19.00 horas en el pabellón Eduardo Lastrada y será la despedida del año del equipo de Víctor Lapeña, clasificado en una anodina décima posición de la tabla.

La junta directiva ya está pensando en los proyectos de cara al año que viene. Uno de los más ilusionantes sería acoger la Copa de la Reina de la temporada que viene. Sería un incentivo más de un equipo que tiene la cantera más potente de Aragón con sus más de 300 jugadores en todas las categorías. Un atractivo especial sería disputar la Minicopa de la Reina que el pasado mes de febrero ganó el equipo infantil femenino de primer año del Casablanca, entrenado por Sara Sancho y Daniel Rubio. En la final se impusieron de manera concluyente ante el Donosti Basket por 73 a 49. Como colofón, fue nombrada la jugadora más valiosa del campeonato la pívot Claudia Langarita.

De concretarse, este equipo jugaría sus partidos en el pabellón del Stadium, mientras que los seis equipos que se jugarían la Liga competirían en el Siglo XXI. Es un sueño del equipo verderol que está estudiando la viabilidad económica de este proyecto que podría hacerse realidad en febrero del año que viene.

Es una competición que es querida muy especialmente por el baloncesto femenino zaragozano. Es el gran título de una modalidad que tiene especial tirón dentro del deporte femenino en Zaragoza. Siempre será recordado un 14 de mayo de 1990 en Jerez. Ese día el Banco Zaragozano se impuso en la final de la Copa de la Reina al Microbank El Masnou por un apretado 95-94. Era un conjunto que entrenaba Zaga Zeravica, que lideró la argentina Karina Rodríguez y en el que jugaba la recordada Pilar Valero.