La 67ª edición de la Vuelta a España regresará a Aragón después de no haber transitado por sus carreteras en las tres ediciones anteriores y lo hará a otros tantos escenarios inéditos en el itinerario de la carrera española. La salida de la capital oscense en la séptima etapa es la única ubicación que se había incluido con anterioridad en la Vuelta, mientras que ni la localidad zaragozana de Tarazona, ni la ascensión al atractivo Fuerte de Rapitán en Jaca, ni Alcañiz en el circuito de velocidad de Motorland habían acogido antes un comienzo o final de etapa de la ronda.

En el Altoaragón, Huesca fue punto de partida de una etapa en la ronda española en la edición del 2007, en la novena jornada, y se desplazó hasta finalizar en la estación invernal de Cerler en la cima del Ampriú con victoria para Piepoli. Con anterioridad, la capital oscense vio partir al pelotón en el 2003 hacia Cauterets (Francia) donde venció el danés Michael Rasmussen; en 1999, con destino al Valle de Arán, ganó el italiano Daniele Nardelo; en 1966 hacia Pamplona con triunfo del holandés Gerben Karstens; en 1957 cruzó la frontera francesa para llegar a Bayona y victoria del vizcaíno Antonio Ferraz; y la primera vez que despidió a los ciclistas fue en 1942 rumbo a San Sebastián con triunfo del hombre que ostenta el récord de victorias de etapa en la Vuelta con 39: Delio Rodríguez. Además, las calles oscenses han albergado en cuatro ocasiones finales de etapa.

Por su parte, Jaca, que acogió en 1991 un final de etapa del Tour en la que se impuso por primera vez Induráin, también ha albergado al pelotón de la Vuelta a España en diversas ocasiones, aunque nunca lo había hecho con un final en el inédito Fuerte de Rapitán con casi tres kilómetros de ascensión por encima del 7%. Ni Tarazona ni Alcañiz han visto en su historia detenerse al pelotón de la ronda española, aunque en varias ocasiones lo han visto pasar, entre otros lugares, camino de Soria o Zaragoza. La Vuelta a España 2012 recorrerá el norte de España con diez finales en alto.