La capital aragonesa contará desde la próxima semana con un nuevo concepto de concesionario. El propietario de Augusta Aragón, Roberto Machín, ha impulsado un innovador espacio comercial que englobará una exposición de motos de la mítica firma Harley Davidson, toda la gama de vehículos de Suzuki y coches multimarca de ocasión, así como una tienda de complementos y una hamburguesería de temática motera. El nuevo establecimiento, en el que se han invertido cerca de 1,5 millones de euros, se sitúa en la carretera del aeropuerto (junto a la tienda de Porcelanosa de la autovía de Logroño) y ocupa una superficie de más de 2.000 metros cuadrados.

"Lo que pretendemos es que la gente, además de visitar el concesionario, pueda venir a picar algo o a mirar una cazadora para la moto", explicó ayer Machín, que también es propietario del restaurante El Foro.

El de la carretera del aeropuerto será su segundo negocio de venta de coches en Zaragoza. Para ello ha tenido que adquirir el único concesionario de Harley Davidson que existía en la ciudad (Alvo Moto Racing, en la calle Miraflores) y el de Suzuki que gestionaba Vicente Colás en la carretera de Castellón. Tanto él como buena parte de la plantilla de ambas concesiones pasarán a trabajar en las nuevas instalaciones. "Vienen nueve empleados y hemos realizado cinco nuevas contrataciones", concretó Machín, que confió poder inaugurar el espacio "en ocho o diez días".

El nuevo establecimiento permitirá al empresario diversificar su negocio dentro del sector. "De esta forma abarcamos mucho más mercado", indicó el propietario de Augusta Aragón, concesionario oficial de BMW y Mini. Situado en la avenida Alcalde Caballero, la firma se fundó en 1992, factura en torno a 25 millones de euros y emplea a 48 personas.

El espacio de la carretera del aeropuerto contará además con un taller mecánico para dar servicio a los vehículos que venda, aunque en un futuro podría convertirse en multimarca.