El conflicto laboral en Lear Épila vive sus últimas horas. La plantilla mostró ayer, durante la celebración de una asamblea, una buena acogida al preacuerdo alcanzado el pasado miércoles entre la dirección y el comité de empresa en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA). Sin embargo, hasta hoy no se conocerá el resultado de la votación (el 90% había votado al cierre de esta edición). Pese a ello, todo apunta a que la mayoría de los 330 empleados de la factoría aceptará las condiciones pactadas, entre las que figura el compromiso de Lear de recolocar hasta a 80 trabajadores en otras compañías del entorno de Figueruelas. Para el resto, la multinacional ofrece indemnizaciones de 55 días por año trabajado, con un máximo de 42 mensualidades, y una paga lineal de 4.500 euros.

"El acuerdo alcanzado no se puede superar de ninguna manera", subrayó ayer el presidente del comité de empresa, Isidro Agustín, al término de la asamblea. En este sentido, destacó que, en el caso de las recolocaciones, Lear costeará durante cuatro años y medio la diferencia salarial neta entre lo que el trabajador cobraba en Lear y lo que percibirá en la nueva compañía. Ese abono se realizará por adelantado y, posteriormente, el empleado percibirá el sueldo que fije la nueva empresa. Además, el contrato será fijo o indefinido y mantendrá la antigüedad generada en Lear.

Otro de los puntos del acuerdo recoge prejubilaciones para los mayores de 55 años, de forma que lo que perciban no supere lo establecido para los despidos. Además, Lear se hará cargo del convenio especial con la Seguridad Social.

CONVENIO DE CUATRO AÑOS

Este plan social y el plan industrial --la firma intentará traer más carga de trabajo antes de que expire el contrato para suministrar asientos del Corsa, antes de octubre del 2018-- forma parte de un nuevo convenio colectivo que tendrá una vigencia de cuatro años y que también recoge una subida salarial del 1% anual. El pacto se ha realizado para los próximos cuatro años para que cubra una posible prolongación de la vida del actual Corsa más allá del 2018. La fabricación de asientos para la nueva generación de este vehículo corresponderá a Johnson Controls tras la adjudicación de GM España.

Hasta entonces, el comité y los sindicatos velarán por el cumplimiento del acuerdo alcanzado con Lear.

HUELGA DESACTIVADA

Aunque el comité había aplazado hasta el domingo una nueva posible convocatoria de huelga en Lear, el más que probable de la plantilla al preacuerdo supondría la retirada de los paros, que amenazaban con detener la producción de GM España por el desabastecimiento de asientos para el Corsa.