El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, mostró ayer su "preocupación" por las repercusiones que puede tener para la comunidad autónoma la ampliación de la Unión Europea y abogó para que, ante la "reordenación de los fondos comunitarios, se garantice la participación de las regiones en los órganos de decisión". Iglesias, que intervino en el acto de apertura de la Conferencia sobre Aragón en Europa que se celebró en Zaragoza organizada por la revista The Economist en colaboración con el Gobierno de Aragón e Ibercaja, habló de las consecuencias que pueden existir desde el punto de vista económico y de representación, al tiempo que incidió en los problemas que más preocupan a Aragón en relación a su posicionamiento en el contexto de la UE.

En cuanto a las consecuencias financieras, Iglesias señaló que la "recesión demográfica" sufrida por Aragón en la segunda mitad del pasado siglo y la especialización industrial, propició que la comunidad tenga "unas cifras por habitante superiores a la media española", lo que provoca que "no haya acceso a los fondos estructurales, pese a que hay zonas en las que se necesitarian estas ayudas". Respecto a la reforma de la Política Agraria Común (PAC) señaló que "la sostenibilidad presupuestaria va a ser una grave preocupación", en relación a que no se cuente con las circunstancias de territorios como Aragón y reclamó de la PAC que "no sólo debe permitir una renta digna, sino que también juega una función para evitar la degradación del medio ambiente y la desertización", informó Europa Press .

Iglesias previno de las consecuencias de la ampliación que pueden derivar el centro de gravedad hacia el norte y hacia el este de Europa y abogó porque se "garantice la participación de las regiones en los órganos de decisión" ante la reordenación de los fondos comunitarios. Reclamó apoyos para la defensa del paso pirenaico del Vignemale.

Por su parte, el ex primer ministro francés Edouard Balladur defendió ayer en las mismas jornadas que la descentralización y las políticas liberales son dos elementos esenciales en Europa que incrementarán la democracia y la libertad. Balladurd abogó por crear una especie de Senado europeo, con fórmula de potenciar esta participación regional, ya que el peligro de intervencionismo en la construcción de la UE no sólo proviene de los estados, sino de la propia Europa. En su intervención ¿Existe o no una crisis del liberalismo? , Balladur defendió la libertad económica pero "organizada con disciplina y controles".