Más temporalidad, una mayor precariedad y salarios más bajos. Esa es, en resumen, la perspectiva laboral que tienen los inmigrantes en Aragón, según el estudio presentado ayer por CCOO Aragón. Durante el 2010 se firmaron 116.001 contratos a extranjeros, de los que 7,56% fueron indefinidos y el 92,44% temporales. No obstante, fuera de estas estadísticas están aquellos que no han firmado ningún contrato y solo figuran en las cifras de la incalculable economía sumergida. En estos momentos, en la comunidad existen 170.241 personas procedentes de otros países (el 12,67% de la población total).

El informe, que fue presentado por el secretario general de CCOO en Aragón, Julián Buey, y la secretaria Política Social y Migración de esta central, Marta Arjol, también detalla que el sector de los servicios concentra el 50,24% de la actividad de este colectivo, seguido de agricultura con el 30,87%, la construcción con el 13,33% y la industria con tan sólo 5,56%. Además, las ocupaciones más ofertadas fueron peón agrícola, peón de industrias manufactureras, personal de limpieza y camareros.

DESEMPLEO AL ALZA La población parada en Aragón durante el pasado año se situó en 91.686 personas, un 74% españoles y un 26% extranjeros. Así, la tasa de paro en el 2010 fue de 12,37% entre los españoles y un 27,23% entre los extranjeros, frente a los datos de 2009, que era del 9,9% entre los españoles y del 12,82%, entre los inmigrantes. En cuanto a sectores, los que concentran una mayor pérdida de empleo son la construcción y la agricultura, según refleja el estudio del sindicato.

Por otro lado, los hombres extranjeros tenían una tasa de ocupación del 88,28 % frente al 62,97% de los hombres españoles, mientras que en el caso de las mujeres, el 71,68 % eran extranjeras frente al 47,73 % de españolas.

IMPLANTAR MEDIDAS Los responsables de CCOO apuntaron, a la vista de los datos, que los inmigrantes tienen mayores dificultades en el acceso al mercado laboral, lo que supone un importante "obstáculo" para el acceso a derechos básicos como la documentación, la vivienda o la protección social. Además, alertaron de que estos pueden acabar "en pobreza y exclusión social".

Por ello, Buey y Arjol resaltaron que el empleo es el aspecto fundamental para la "inclusión social de los inmigrantes" porque como ciudadanos "pagan impuestos, aumentan cotizaciones a la seguridad social, rejuvenecen la población, aumentan la diversidad cultural y son imprescindibles" para el sostenimiento del sistema de pensiones.

Por todo ello, el sindicato ha solicitado a las instituciones que valoren a este colectivo porque pueden "sostener" al país económicamente en una época en la que la natalidad no pasa por sus mejores momentos.