Los trabajadores de la planta de CAF aceptaron ayer la última propuesta planteada por la empresa para reorganizar el trabajo y adaptarse a la bajada de producción que sufre la factoría de trenes de la avenida Cataluña, en la que trabajan 760 personas. Este plan, que ha evitado la aplicación de un ERE de suspensión para 550 empleados, que no contemplaba compensación económica, consiste en una redistribución irregular del calendario de trabajo para lo que queda del 2015 y los años 2016 y 2017. La propuesta fue apoyada por 286 empleados y rechazada por 240.

En un principio, la empresa había planteado dejar de trabajar días enteros, pero al final se ha optado por una reducción de jornada diaria, una medida menos dañina económicamente para los trabajadores. Así, la plantilla irá acumulando esas horas para recuperarlas cuando la producción vuelva a subir. La planta acaba de adjudicarse el tranvía de Luxemburgo y el metro de Toluca (México).