El Museo de Zaragoza aprovechó la jornada para inaugurar --en la sala 24-- El aliento de los dioses, que incluye alrededor de medio centenar de restos arqueológicos descubiertos en Aragón, que nos permite conocer como se vivía hace millones de años. En la sala se pueden ver reproducciones de imágenes de la cueva de la Fuente del Trucho, donde aparecen unas manos en negativo de hace más de 20.000 años; también de cuevas de Caspe, jaraba o La Puebla de Castro; así como piezas que servían para el ritual del vino (un equipo de servicio completo), para la práctica religiosa, quemadores (del siglo I y II) y piezas que servían para el banquete (de los siglos V al II antes de Cristo), entre otras.