La ampliación del museo Pablo Gargallo, que integrará el edificio colindante (c/ Torrenueva, 20) con las instalaciones del centro, comenzará definitivamente el próximo 30 de enero. Así lo explicaron ayer la teniente de alcalde de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Rosa Borraz; el arquitecto de la reforma, Ángel Peropadre y el jefe de servicio de Cultura del ayuntamiento, Rafael Ordóñez.

"El museo había crecido tanto en las piezas que conforman la colección permanente como en el número de actividades que se vio la necesidad de ampliarlo", explicó Rosa Borraz que aseguró que la ampliación permitirá "una ampliación y mejor redistribución de las obras del museo".

Así, una vez que se concluya la adecuación del edificio anexo, el actual emplazamiento se dedicará exclusivamente a la exposición de la colección permanente de Pablo Gargallo que tiene el museo mientras que la nueva superficie se destinará para las actividades complementarias y servicios que ofrece el centro así como el fondo documental y archivo.

Tras las reformas, que se prolongarán durante 17 meses por lo que concluirán en junio del 2008 y en los que el centro estará cerrado, las esculturas se reagruparán temáticamente para facilitar su contemplación. Así, las exposiciones temporales se habilitarán en dos espacios creados en la planta baja y en el sótano. Otra de las novedades es que se amoldará un nuevo espacio en la tercera planta del edificio para guardar los dibujos y cartones en condiciones ambientales idóneas. También está previsto modificar el actual cubrimiento del patio central del edificio instalando una cúpula. Como complemento, en la planta baja, se mejorará la recepción y se creará una tienda.

PRESUPUESTO AJUSTADO

En resumen, los trabajos, que cuentan con un presupuesto de 3.700.000 euros, se dividen en tres grandes áreas: renovación de las instalaciones (electricidad, seguridad...), la rehabilitación del nuevo edificio y la adecuación del ya existente para la colección permanente. Un proyecto que tampoco pretende remodelar completamente las instalaciones tal como explica su arquitecto: "No tengo la pretensión de que cambie mucho el espacio ya que está muy consolidado y aceptado. El objetivo es mantener el carácter del mismo", aseguró Ángel Peropadre que recordó los primeros trabajos de adecuación del museo, de los que también se encargó: "Este palacio era muy apto para acoger la obra de Pablo Gargallo. Era perfecto porque los trabajos que se tenían eran pocos y pequeñas piezas con lo que este espacio permitía contemplarlas de una forma bonita". No obstante, el aumento de la colección (de las 60 piezas iniciales se ha pasado a las 177 de la actualidad) ha provocado que sea necesaria esta ampliación para poder contemplar los trabajos de Gargallo en toda su plenitud ya que, actualmente, están "demasiado juntas para contemplarlas en plenitud".

No obstante, los aficionados al arte de Pablo Gargallo no se quedarán con ganas ya que el 22 de febrero se inaugura en la Lonja de la capital aragonesa una gran antológica del aragonés. Una retrospectiva que ahora mismo está en La Pedrera de Barcelona y que está cosechando un auténtico éxito de público. La muestra, comisariada por Rafael Ordóñez, consta de 104 obras (escultura, cartones y dibujos) fechadas de 1900 a 1934 y representativas de la trayectoria del artista.

En ella, se podrán ver obras que nunca han estado en Zaragoza y que provienen de lugares tan lejanos como Estados Unidos, Bélgica, Suiza, Francia y Alemania, entre otros. La antológica también cuenta con esculturas del museo zaragozano que ahora va a emprender su ampliación.