El empresario catalán Enrique Puig, consejero delegado de la firma de perfumes y cosmética Puig, y amigo personal del Rey (ambos, en la foto), falleció el jueves en Sevilla, a los 68 años, de un infarto fulminante. Puig estaba en la capital andaluza para asistir a la fiesta de presentación de la revista Vanity Fair, donde la noticia de su muerte cayó como un mazazo.

Enrique Puig era toda una institución en el mundo de las fragancias, pero su nombre siempre estará ligado a la Copa del Rey de Vela de Palma, que patrocinó durante 25 años y en la que fue armador del Azur de Puig, el mítico velero en el que compitió la infanta Cristina en numerosas ocasiones. Gracias a él, la regata de Mallorca es una de las más prestigiosas del circuito. En reconocimiento a su labor, el pasado año recibió un homenaje en el Club Náutico de Palma al que asistieron los Reyes y los Príncipes.

Puig fue junto a sus hermanos Antonio, Mariano y José María el artífice de la transformación de la empresa fundada en 1914 por su padre. Puig Beauty & Fashion Group es una multinacional con presencia en 150 países y más de 4.000 empleados. Entre las fragancias que comercializa están Carolina Herrera, Prada y Paco Rabanne.