El Ejecutivo italiano, que preside Enrico Letta, se someterá a un nuevo voto de confianza en el Parlamento el próximo 11 de diciembre para confirmar la apertura de una nueva fase, tras la salida de su coalición del partido del ex primer ministro Silvio Berlusconi, el conservador Forza Italia.

Mediante un comunicado divulgado hoy, el ministro para las Relaciones con el Parlamento, Dario Franceschini, informó de la fecha acordada con los presidentes de la Cámara de los Diputados (baja) y del Senado (alta) para que se celebre en sus plenos el debate y votación de esta cuestión de confianza.

Este trámite parlamentario, que se celebrará solo un día después de la cumbre ítalo-española en Roma que presidirán Letta y el jefe del Ejecutivo de España, Mariano Rajoy, supondrá además una especie de nueva investidura para el actual Gobierno, tras las celebradas los pasados 29 y 30 de abril una vez acordada la coalición, entre otras, con la formación de Berlusconi.

Esta cuestión de confianza se votará en una misma jornada: por la mañana en la Cámara de los Diputados, donde la mayoría absoluta de Letta es más holgada, y por la tarde en el Senado, en la que el centroizquierda no logró mayoría absoluta en las elecciones de febrero y donde más se puede sentir la retirada del apoyo del partido de "il Cavaliere".

El anuncio de la fecha para esta especie de nueva investidura llega después de que se reunieran hoy mismo en Roma el presidente de la República, Giorgio Napolitano, y el propio Letta, quien quería que la cita con el Parlamento fuera tras las primarias que elegirán este próximo domingo al nuevo secretario general de su formación, el Partido Demócrata.

Napolitano se comprometió el pasado 28 de noviembre con la formación de Berlusconi a que Letta acudiría de nuevo al Parlamento para comprobar formalmente si su Gobierno sigue contando con el apoyo mayoritario de las cámaras, una vez que ellos, Forza Italia, se lo habían retirado por, según dijeron, un desacuerdo sobre los presupuestos del Estado de 2014.

Letta conserva, sin embargo, el apoyo del grupo escindido del antiguo partido de Berlusconi, el Nuevo Centroderecha del viceprimer ministro, Angelino Alfano, que tiene 30 senadores que garantizan "a priori" la estabilidad del Ejecutivo en la cámara.

La escisión del ala más moderada del antiguo Pueblo de la Libertad (PDL) en el Nuevo Centroderecha de Alfano llegó, sobre todo, por el desacuerdo con quienes ahora integran Forza Italia ante el apoyo que, en opinión de los moderados, hay que seguir dando al Ejecutivo pasara lo que pasara con Berlusconi en el Senado.

La actual mayoría absoluta del Gobierno en el Senado cuenta con una diferencia de menos de 10 miembros por encima de la mitad más uno de los escaños, que son 161, toda vez que en la Cámara de los Diputados su ventaja es de unos 65 parlamentarios.