Los vecinos de San Mateo de Gállego están ahora más seguros, ya que se han instalado en la localidad dos desfibriladores móviles que se podrán usar en caso de emergencia. Ambos aparatos, que han tenido un coste de unos 3.000 euros, han sido donados por las dos cooperativas existentes en la localidad (ganadera y agrícola) y los empresarios de los polígonos industriales del municipio Río Gállego 1 y 2. El mantenimiento de los aparatos y los cursos de formación para saber utilizarlos son sufragados por el consistorio sanmateano.

Los equipos cardíacos se han instalado en el pabellón polideportivo, para dar también servicio a las piscinas, que se sitúan junto a este equipamiento municipal, y otro de ellos, en el campo de fútbol. «Son espacios que registran una gran cantidad de público, más de 1.000 usuarios en ocasiones», explica en el alcalde sanmateno, José Manuel González.

Para el correcto uso de los desfibriladores, se han organizado cursos que han permitido a los alumnos obtener el correspondiente diploma acreditativo, respondiendo de paso a la normativa vigente que marca la DGA.

En concreto, han recibido la formación varios técnicos deportivos del CD San Mateo, profesores del CEIP Galo Ponte, miembros de Protección Civil de San Mateo y personal municipal de los servicios deportivos.

En el transcurso de un partido de fútbol en el que jugaba el equipo local, se hizo entrega de los diplomas acreditativos que certifican a los alumnos la formación recibida sobre estos equipos. T