Los grupos de izquierdas en las Cortes aragonesas han propuesto una medida para que no se puedan cortar los suministros básicos de luz, gas y agua a familias que ingresen manos de 1.065 euros al mes. La propuesta establece ayudas públicas en los casos de vulnerabilidad y se pretende que con su fuerza de ley no esté al albur de decisiones gubernativas. Además, se quiere potenciar el trabajo preventivo de los servicios sociales. La lucha contra la pobreza energética avanza y además en un periodo especialmente delicado, ante la cercanía del invierno.