Agapito Iglesias reapareció y rompió ayer su silencio en la Junta General de Accionistas del Real Zaragoza. El accionista mayoritario de la entidad zaragocista afirmó que lo más probable es que se tenga que hacer una ampliación de capital para dotar de más fondos a la SAD y aseguró que hasta el momento no ha recibido ninguna oferta para vender el club. "La única solución que hay es hacer una ampliación de capital, porque es donde realmente veremos si existe más capacidad de que haya más ingresos en el Real Zaragoza. De ese modo podría participar todo el mundo, pero en las anteriores acudió la gente que acudió y entre ellos yo", dijo el empresario soriano. Pero luego, el presidente Fernando Molinos apostilló: "Está todo muy tierno y en estos momentos no se puede dar una información concreta y veraz sobre este asunto". Anteriormente ya se hizo la denoninada operación acordeón, con Eduardo Bandrés como presidente, para captar capital.

Además, Agapito Iglesias negó ante los accionistas que hubiera recibido ofertas para vender el Zaragoza. "Puedo asegurar que no he puesto ninguna traba para que eso pudiera producirse. Lo hice público en su momento, pero a fecha de hoy no ha habido ni una sola oferta interesada por el Real Zaragoza, ni una", afirmó el accionista mayoritario. De ese modo, el empresario desmintió las declaraciones realizadas por Alfonso Gracia, abogado de Cimbra, que era uno de los gabinetes encargados de estudiar las propuestas de compra que pudieran aparecer. Gracia manifestó en Aragón Radio que había habido ofertas. Lo que no hizo Agapito fue decir la cantidad que había pedido para vender pese a ser cuestionado por ello.

El empresario soriano, tras espetarle a un accionista que "quiero al Zaragoza más de lo que usted piensa, es decir como usted o mucho más", afirmó que no sentía orgulloso de haber metido al club en un proceso concursal para evitar su posible desaparación a causa de su mala gestión: "No estamos orgullosos de haber entrado en concurso, pero sí de intentar salir lo antes posible de ese proceso. Lo que se ha hecho es reestructurar toda la deuda del Real Zaragoza para los próximos 8 años. Nos hubiera gustado hacerlo sin tener que ir a concurso, pero era imposible llegar a un acuerdo con todos los acreedores y proveedores", explicó el accionista mayoritario, quien añadió: "Entendemos que podemos llevar a buen puerto el convenio. El presupuesto de los tres próximos años está ajustado al contrato de televisión".

ÁLVARO, 30% DEL RACING

Agapito Iglesias destacó que la política deportiva del Zaragoza ha cambiado y que a partir de ahora van a apostar por fichar jugadores jóvenes con proyección. Además, afirmó que, salvo Roberto, el resto de futbolistas de la actual plantilla son propiedad del club aragonés. "Hay un jugador, que es Roberto, con el que un fondo determinado hizo una inversión para que el Real Zaragoza pudiera disfrutar de él y ojalá lo podamos disfrutar mucho tiempo. El resto de jugadores estamos intentando que sean propiedad del club, pero, a veces sus equipos se quedan con parte de sus derechos, como sucede con Álvaro, que el 30% del jugador pertenece todavía al Racing. La política es intentar tener jugadores jóvenes y con proyección", dijo el empresario soriano.

Durante la asamblea también salió a relucir el nombre del portugués Miguel Lopes, que sigue en el Oporto. El Zaragoza no inscribió a tiempo al jugador y luego se vio obligado a indemnizarle. "Con Lopes se llegó a un acuerdo tras no poder inscribir su tránsfer en la Federación Española, pero no recuerdo la cantidad", explicó Agapito. El club aragonés pagó 150.000 euros a Lopes, que era la mitad del contrato que iba a percibir durante su temporada de cesión.