—En los dos últimos partidos ha sido ya titular. ¿A qué nivel se encuentra ahora mismo?

Me encuentro bien, pero, como todos los jugadores, mi último partido oficial fue en el mes de enero y al final necesito minutos para ir cogiendo poco a poco el físico. Cada vez me veo mejor y lo importante es que me respeten las lesiones como está sucediendo hasta ahora. Todavía me falta coger más ritmo.

—Usted es lateral izquierdo, pero curiosamente debutó jugando como central.

El entrenador estuvo hablando conmigo y, aunque no había jugado nunca de central derecho, aprovechando la baja de Marcelo Silva, fue bueno para mí poder coger noventa minutos de juego en una posición que se corre mucho menos que de lateral. Yo me vi bien, pero, aunque no es mi posición, intenté hacerlo lo mejor posible para el equipo y el entrenador pudo darme un partido.

—Frente al Elche ya actuó en su puesto. ¿Cómo valora su actuación en ese encuentro?

Me vi bien. Físicamente estuve a un buen nivel y cada vez espero ir a más en todos los sentidos. Fue mi segundo partido y pude comprobar que cada vez me estoy encontrando mejor.

—En ese partido fue el protagonista de una discusión con Manu Lanzarote en los últimos minutos del mismo. ¿Qué sucedió?

Esto es fútbol y al final en el campo todos queremos ganar. Es una acción en la que discutes como puedes discutir con otro compañero en otra situación. Al final todos queremos ganar, estás de mala leche, íbamos perdiendo 3-1, creo que era en ese momento, y tienes una discusión que no hay que darle más importancia. Son cosas que pasan en el mundo del fútbol.

—Desde la grada dio la impresión de que usted le decía que se desmarcara para que pudiera darle el balón en mejores condiciones y él se lo recrimina.

Yo le pedí que se desmarcara para darle la pelota para intentar que buscara un centro, pero él, que también tiene su opinión, vio mejor que se la diera al pie y discutimos. Esto es fútbol y al final son cosas que pasan.

—¿No tiene la impresión de que parece que Lanzarote juega en muchas ocasiones su partido?

YO no soy quien para criticar a compañeros sino al contrario, porque aquí estamos todos en el mismo barco. Lanzarote también ha marcado cuatro goles en dos partidos y la realidad es que aporta su granito de arena al equipo. Aquí estamos todos para ayudar.

—¿Hay algún motivo para que el equipo se haya venido abajo en las cinco últimas jornadas de Liga?

Si lo supiéramos ya lo habríamos solucionado, pero, en mi opinión, lo que nos está faltando es a veces tener que jugar un poco más feo. Siempre es bueno tratar de ir para adelante y meter más goles cuando vas ganando, pero a veces, cuando las cosas van mal, lo importante es mantener la portería a cero e intentar sacar los tres puntos, porque nosotros tenemos gente arriba que son buenos jugadores y pueden hacer goles. Eso nos sucedió contra el Sevilla Atlético y al final acabamos perdiendo. Tenemos que ser un equipo más compacto, aguantar el cero-cero y luego tratar de buscar la victoria. Contra el Elche, salvo el último gol, que llega tras una buena pared y es un buen tanto, los otros dos son evitables. No es normal que te vayas al descanso perdiendo 0-3 cuando al principio del partido has tenido más o menos controlada la situación.

—¿Cree que en el Real Zaragoza hay más presión que en otros equipos por subir?

Aqui es difícil jugar cuando las cosas se ponen mal, porque hay mucha presión. Tenemos mucha gente nueva, entre ellos yo, y cuesta acostumbrarse a este tipo de cosas. Debemos ser más compactos como equipo y saber defender para luego tratar de ganar los partidos. Entre todos estamos buscando la solución, pero defensivamente tenemos que estar mejor. No nos pueden meter tres goles en 45 minutos.

—¿Notan que el Zaragoza es un equipo obligado a estar arriba?

La verdad es que yo no la noto, porque llevo jugando con presión mucho tiempo. Pero es normal, porque el Real Zaragoza, a pesar de estar en Segunda División, es un club grande y que todo el mundo quiere que esté en Primera. Soy consciente del club en que estamos.