El Real Zaragoza disputa mañana su segundo partido amistoso de la pretemporada rindiendo visita al conjunto italiano del Cagliari con la intención de comprobar su estado frente a un rival de entidad como el sardo.

Ambos equipos se enfrentarán en el estadio de Sant'Elia, donde juega el Cagliari, a partir de las 20.45 horas en lo que será el partido de presentación ante su afición.

El equipo transalpino descendió la pasada temporada de la Serie A a la B tras quedar antepenúltimo en la clasificación.

Para este enfrentamiento el técnico del conjunto aragonés tiene previsto llevarse a todos los jugadores disponibles, aunque no todos jugarán, según ha explicado hoy en rueda de prensa.

El preparador se llevará en principio a veintitrés hombres a Italia, contando con los tres porteros, y la idea no es repartir minutos de una forma equilibrada sino que habrá algunos que jugarán más que otros porque hay jugadores que todavía no se han recuperado plenamente del virus estomacal que afectó a la plantilla la pasada semana.

Popovic ha explicado que este encuentro se gestó de una forma "un poco inesperada" pero que es bueno enfrentarse contra un rival del nivel que tiene el Cagliari porque es un equipo que les lleva ventaja en el tema de la preparación.

"Va a ser un partido de exigencia y quiero ver cómo responde el equipo. Daremos oportunidad a los nuevos para que se vayan adaptando. Es una buena oportunidad para todos porque es un partido exigente, ya que el rival es un equipo italiano, es su presentación ante su público y para ellos es un partido que tienen mucha importancia", ha destacado.

Para el Real Zaragoza, a juicio de su técnico el encuentro es un entrenamiento "contra un rival por encima de las exigencias para este momento" pero que ayudará a conseguir lo que desean en un futuro.