El Gran Colisionador de Hadrones, la gran instalación del CERN en Ginebra (Suiza) famosa por sus investigaciones sobre partículas elementales como el bosón de Higgs, sucumbió el viernes ante la actividad de una comadreja, un mamífero carnívoro de apenas 300 gramos de peso. Según informaron los responsables del LHC, el pequeño animal se introdujo en uno de los túneles de la instalación, mordió un cable y ocasionó un cortocircuito que obligará a la instalación a permanecer paralizada durante varios días, posiblemente dos semanas. Los ingenieros que investigaron el incidente encontraron los "restos carbonizados de una pequeña criatura peluda cerca de un cable eléctrico mordido", explicó Arnaud Marsollier, jefe de comunicación del CERN.

El LHC estaba a punto de lograr esta semana el hito histórico de alcanzar una velocidad jamás obtenida en un acelerador de partículas.