El Gobierno balear destituyó ayer al gerente del Hospital de Inca (Mallorca) y anunció que abrirá expediente disciplinario a tres profesionales del centro por la muerte del senegalés sin papeles Alpha Pam, que falleció el pasado 21 de abril de tuberculosis sin que se le hicieran las pruebas pertinentes. Fernando Navarro, que accedió a la gerencia en enero, "debía haber garantizado la correcta aplicación de los criterios enviados por las autoridades sanitarias sobre el compromiso de pago", expuso el consejero de Salud, Martí Sansaloni, quien subrayó la gratuidad de la atención de urgencias y a embarazadas, a niños y en casos de enfermedad mental y salud pública. Médicos del Mundo reclama esta gratuidad desde que se impuso la orden de cobrar por la atención sanitaria en Baleares a quienes carezcan de tarjeta.

El portavoz de la entidad, Miquel Reyero, lamentó que no se hayan retirado los formularios de pago hasta la muerte de Alpha Pam, "cuando el presidente Bauzá y Sansaloni sabían que no son casos puntuales". "Hace mes y medio --añadió-- nos reunimos con ellos y les expusimos 170 casos. Lo peor es que tras esta muerte sigue pasando. La semana pasada acompañamos a una embarazada a un centro de salud porque no la atendían si no pagaba".

Apoyado en el informe interno, el consejero anunció además la apertura de expedientes disciplinarios al jefe de admisiones, al enfermero que atendió a Pam y a la doctora que le diagnosticó bronquitis. El anuncio mereció una concentración de protesta de un centenar de profesionales de enfermería del Hospital de Inca, que pidieron la dimisión del consejero y del presidente José Ramon Bauzá. "Los profesionales no debemos pagar responsabilidades políticas", afirmó la enfermera Mila Alfagema, mientras que el representante de UGT Tomeu Ballester denunció las incoherencias del Ejecutivo balear.