El PP cumplió ayer su advertencia y en la comisión de Hacienda de las Cortes votó en contra de las modificaciones presupuestarias solicitadas por el Gobierno de Aragón para hacer frente a diversos pagos, el principal, el que permite asumir los compromisos salariales con la educación concertada. La aritmética parlamentaria da a veces sorprendentes mayorías, que es lo que ocurrió ayer, y el voto de los populares se sumó al de Podemos, por lo que las modificaciones más trascendentes que llevaba el Gobierno a la Cámara para su aprobación no prosperaron. Es lo que sucedió con dos créditos de algo más de 15 millones de euros destinados para pagar las nóminas de la educación concertada, auténtica protagonista política de la legislatura.

El rechazo del PP y Podemos a favorecer esas modificaciones presupuestarias dejan en una situación comprometida al Gobierno autonómico, que ayer ya estudiaba qué salida legal tienen para pagar los salarios a partir de octubre. La votación vino precedido de un debate tenso, en el que la posición de los populares era intuida por el resto de la Cámara. El portavoz del PP en la comisión, Antonio Suárez, fue claro a la hora de fijar la posición del voto popular. Están «hartos» de que el PSOE pacte unos presupuestos con Podemos y cuando este partido rechaza apoyar a los socialistas, estos acudan al PP para sacar adelante lo que no han sido capaces de sacar adelante. Y eso sin negociación de ningún tipo. «Estamos hartos de imposiciones permanentes sin negociación previa».

La ausencia de diálogo también fue confirmada por el portavoz de Hacienda de Podemos, Héctor Vicente, quien aseguró que su partido se enteró poco antes de la reunión de las partidas que se iban a modificar. A juicio de Vicente, el PSOE debía haber negociado previamente para garantizarse los apoyos necesarios que le permitan desarrollar su programa de Gobierno. La portavoz autonómica de la formación morada, Maru Díaz, se preguntó qué esperaba Lambán, y le recordó que gobierna en una minoría con 20 diputados que le obliga a dialogar y pactar con otras fuerzas. «¿Esperaba que esta equidistancia no le pasara factura?», se preguntó Díaz. «Lo que ha sucedido hoy (por ayer) es la consecuencia de pactar un presupuesto con Podemos y querer ejecutarlo con el PP después. Lambán tiene que decidir cuál es su modelo para Aragón, pero su inmovilismo le ha hecho perder el rumbo», sentenció la portavoz de Podemos.

En la misma línea, Vicente justificó su voto en contra porque «con estos expedientes el Gobierno venía a decirnos que esto era un ordeno y mando y no estamos de acuerdo». A su entender, el Gobierno «es ciego porque quiere» y «débil por el resultado de las urnas» y avisó de que cuando modifique su actuación, «estaremos dispuestos a hablar las cosas».

Asimismo, defendió su voto contrario porque el expediente «falsea el presupuesto para cumplir la Ley de Estabilidad y el Ejecutivo autonómico se ve obligado a «reescribirlo a la mínima oportunidad», lo que «es un fraude democrático»

ACUSACIÓN DEL PSOE

Por su parte, la estrategia defensiva del PSOE fue atacar «al nuevo PP de Beamonte», al que acusó de «irresponsable y sectario» por no apoyar unas partidas destinadas a la educación concertada, en palabras del portavoz en las Cortes, Javier Sada. Este condenó al PP por «instrumentalizar» este tipo de educación y recordó que si está infradotada es porque en el 2015 «existía un déficit presupuestario en la educación concertada de casi 17 millones de euros que fue solucionado por el PSOE cuando llegó al Gobierno de Aragón sin hacer ruido y sin acusar a nadie de nada».

El portavoz socialista quiso distinguir al «PP con responsabilidad de Gobierno» del nuevo PP liderado por Beamonte, que ha tomado «como rehén» la educación concertada «para llegar al Pignatelli». El PP tampoco se escapó de las críticas de Podemos, que en palabras de su portavoz en las Cortes, Maru Díaz, «deja la ideología en segundo plano» y demuestra cuál es su verdadera estrategia, al votar en contra de unas partidas destinadas a un modelo educativo que defiende con vehemencia.

Por su parte, Ciudadanos, el PAR y Grupo Mixto apoyaron los 56 expedientes que ayer se debatieron en la comisión de Hacienda.