Más plazas de magisterio significa más maestros en el mercado y más competencia para poder ejercer, sobre todo en especialidades. "No habrá suficientes colegios para tanto profesor". Son los cálculos con la mente puesta en el futuro y consciente de la situación económica actual. Aurora Susín es estudiante de segundo curso de Magisterio de Primaria en Huesca. "No se pueden ofrecer más plazas en otra universidad porque no hay demanda suficiente", asegura. "En nuestra clase somos unos 60 de media, es muy poco, demuestra que no se llenan las aulas". "Si la Universidad San Jorge (USJ) ofrece el mismo grado la gente se quedará en Zaragoza estudiando y los campus periféricos perderán muchos alumnos". Una tendencia que lleva años ocurriendo. "Los campus de Huesca y Teruel están completamente olvidados por el Gobierno de Aragón", lamenta. Susín forma parte del sindicado Estudiantes en de Defensa de la Educación (EDU). La semana pasada se reunieron con la decana y con los profesores de la facultad. "Vamos a pelear, seguramente hagamos una concentración en repulsa a la implantación del grado en USJ". Por ahora, desde EDU todavía planificando las diferentes movilizaciones posibles. Para la estudiante está claro cuál es el objetivo que hay detrás de este movimiento: "privatizar la educación". "A medio plazo, y con el descenso de matrículas, quitarán una vía en Huesca y Teruel", aventura. "Es su estrategia, la privatización oculta para acabar poco a poco con la pública. Es el camino que ha decidido seguir el Gobierno de Aragón".