La visita del alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, a la Fiscalía Provincial el pasado 4 de mayo para pedir que actúe de oficio contra Ecociudad fue tema de debate durante el pleno de ayer. Todos los grupos le exigieron explicaciones ya que, a día de hoy, ni ha informado sobre los motivos que le llevaron a acudir al ministerio público ni ha dado cuenta de la documentación que tiene en su poder. Santisteve no dijo ni una palabra sobre el tema. Se mantuvo pasivo durante el bombardeo de críticas.

La portavoz del PSOE, Lola Ranera, fue la más dura, entre otras cosas, porque ZeC ha puesto en entredicho la gestión de la sociedad del anterior equipo de Gobierno socialista. "Va a la Fiscalía como quien se va a tomar un café", ironizó. Ranera instó al alcalde a que, si contiene una información de tal relevancia como para ir a los tribunales, se la traslade al resto de consejeros de la sociedad. En la misma línea habló el popular Jorge Azcón, para quien acudir al ministerio público "no es una cuestión de trámite ni burocrática, sino la mayor prescripción de ilegalidad".

Alberto Casañal (C's) confesó que necesitan respuestas. "No sabemos si fue como ciudadano, como alcalde o como presidente del consejo", subrayó. Y Carmelo Asensio (CHA) reclamó la documentación con insistencia.

La visita de Santisteve no fue el único tema de polémica. También se aprobaron las cuentas de Ecociudad --con los votos en contra del PP-- a regañadientes.

FACTURAS

Todos los grupos coincidieron criticaron, esta vez, al concejal de Economía y Hacienda, Fernando Rivarés, por retirar cuatro facturas por valor de 600.000 euros sin dar explicaciones. Según Asensio, se trató de un acto "imprudente" ya que los recibos estaban "debidamente justificados". A Casañal no le sorprendió tanto. "Es más de lo mismo. Siempre falta documentación y hay que volver a convocar al consejo. Esta sociedad es una incertidumbre".

Para Ranera se trata de una estrategia de Zaragoza en Común (ZeC) para "bajar la media de pago". "¿Esta va a ser la nueva situación de la contabilidad de ZeC, que las facturas que no nos interesan se quedan en el limbo?", cuestionó. Por su parte, Azcón criticó una vez más al Gobierno por no escuchar a las mayorías del pleno ya que, según explicó, en el consejo tampoco se cumplen los acuerdos adoptados. La concejala de ZeC Teresa Artigas trató de silenciar a la oposición recordándole que estas facturas eran del 2010 y nunca se habían abonado. Consideró que ya se habían dado las explicaciones necesarias en reiteradas ocasiones.

Rivarés también fue foco de críticas por su gestión de las arcas públicas. Para el responsable de finanzas, el consistorio está "una miajica mejor". Además de sacar a relucir todos los datos no previstos y asegurar que "nunca" cumplirán el "antihumano" plan de ajuste, no dijo nada sobre las medidas que va a tomar el Gobierno para reconducir la situación. El socialistas Javier Trívez, cargó duramente contra Rivarés, a quien respondió que "empieza a estar cansado de tanta estupidez". Cuestionó en más de una ocasión sus conocimientos para llevar este área.