El pleno del Parlamento europeo rechazó ayer en Estrasburgo un informe sobre tarifas y uso sostenible del agua que se mostraba crítico con el Plan Hidrológico Nacional (PHN) español. El PP votó en contra del documento precisamente porque no consiguió que se eliminara la referencia que advertía contra el plan. Los socialistas, sorprendentemente, se abstuvieron, con el argumento de que se oponen a que se considere el agua sólo un bien económico. La polémica sobre la inclusión de una crítica al PHN en un informe europeo se cerró ayer de forma inesperada: no se quitó del texto el párrafo que hablaba del plan, pero se rechazó el informe. Este debate surgió hace un mes, cuando la comisión de Medio Ambiente del Parlamento europeo añadió al documente Política de tarificación y uso sostenible de los recursos hídricos una enmienda en la que se mostraba una "profunda preocupación" por el plan hidrológico de Jaume Matas. El texto pasó ayer por el pleno y el PP intentó que se aprobara otra enmienda que eliminaba la referencia al PHN y se limitaba a recordar que los proyectos sin garantía de viabilidad ambiental no pueden tener fondos europeos. Dicha enmienda era conjunta, de populares y liberales, pero no prosperó. La mayoría de la Eurocámara (224 votos) quería que se mantuviera la advertencia contra el plan español, frente a los 161 parlamentarios que no querían y los 30 que se abstuvieron. Al parecer, una parte del grupo liberal no secundó la enmienda conjunta. Dado que el informe --tras esta primera votación-- iba a prosperar con la crítica al PHN, su autora, la popular Marialese Flemming, pidió a su grupo que votara contra su propio trabajo. Así, el controvertido texto tuvo 89 apoyos, 187 votos en contra y 141 abstenciones. Fueron los socialistas los que se abstuvieron, aunque podían haber sacado adelante el informe y, con él, la advertencia europea contra el plan. Pero argumentaron que rechazan la consideración que se hace del agua en el documento Flemming, pues se ve sólo como un bien económico --de mercado--, sin connotaciones sociales, según la eurodiputada del PSOE María Sornosa. Las interpretaciones de populares y socialistas fueron diametralmente opuestas. Mientras la europarlamentaria del PP aragonés, María Antonia Avilés, se mostró satisfecha al ver que no prosperaba un informe en el que se hacía mención expresa a un Gobierno de un Estado miembro, Sornosa opinó que los populares deben replantearse el PHN. A su juicio, "en el plenario ha quedado constancia del gran rechazo que suscita el plan del PP". Avilés destacó a este diario que hubiera sido "un mal precedente" sacar adelante en Estrasburgo un documento con referencias a un Estado. "Era una injerencia insólita y eso nunca se hace en los informes del Parlamento europeo. Ha sido una pena el montaje y la obsesión por meter el PHN, que es un asunto del Gobierno de España", manifestó. Tras tres meses de trabajo, la Eurocámara tiene que empezar de nuevo. El tema volverá a la comisión de Medio Ambiente, puesto que según la Directiva Marco de Aguas es necesario un sistema de tarificación para los países miembros.