La punta de la crecida del Ebro ha pasado por Zaragoza a primeras horas de hoy, con un caudal de 1.580 metros cúbicos por segundo y una altura de 4,45 metros que todavía se mantiene, sin causar graves afecciones aunque se espera una nueva avenida, la tercera desde final de enero, para el fin de semana.

Desde las 6.00 horas de hoy, el Ebro a su paso por la capital aragonesa alcanza una altura de 4.45 metros y un caudal de 1.581 metros cúbicos por segundo con tendencia estable pese a que se mantiene el nivel de alerta roja.

Fuentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) han indicado a Efe que la riada "ya se ha estabilizado" en la ciudad, aunque se mantendrán los caudales altos durante varias horas antes de que empiecen a descender "lentamente".

No obstante, la previsión de lluvias para esta tarde y mañana al norte de la cuenca anuncian la llegada de "nuevos repuntes" en la cabecera del Ebro ante los que hay que ser "precavidos", aunque se espera que ese episodio sea "similar" al actual e inferior al de finales de enero.

Por el momento, la actual crecida no ha causado afecciones en las motas ubicadas en tierras aragonesas aunque sí ha anegado unas 1.300 hectáreas de cultivos en los pueblos de la Ribera Alta zaragozana.

Además, en Pradilla sigue cortada por inundaciones la carretera CP-003 desde el kilómetro 6,4 al 7.

Aguas abajo de la capital aragonesa, en Pina de Ebro, también ha llegado la punta de la crecida sin causar, por el momento, graves afecciones, según ha indicado a Efe la alcaldesa de la población, María Teresa Martínez.