El Boletín Oficial de Aragón publicó ayer el concurso por el que se licita la adaptación del proyecto de construcción del nuevo hospital de Teruel, con un valor de 180.000 euros más IVA.

Las ofertas para modificar el plan podrán presentarse hasta el 19 de abril y el adjudicatario dispondrá de un plazo de cinco meses para realizar los trabajos. La previsión del Gobierno de Aragón sigue siendo que las obras se inicien en este 2016.

El cambio del proyecto ya existente en Teruel supone, por un lado, adaptar el plan a los importantes cambios normativos que se han producido en los últimos años en materia de mejora en la eficiencia energética de los edificios, según explicó ayer el Ejecutivo en un comunicado.

MEDIDAS ANTISÍSMICAS

La medida adoptada en Teruel es similar a la que se ha llevado a cabo en Alcañiz, donde el proyecto inicial ya ha sido modificado y remitido al Ejecutivo aragonés, que en las próximas semanas lo revisará antes de licitar las obras.

El Departamento de Sanidad matizó ayer que la necesidad de cambiar el planteamiento del proyecto en Teruel "previsiblemente" obligará a definir soluciones constructivas diferentes de las inicialmente previstas, así como la mejora en el rendimiento de las instalaciones y reajuste en la potencia de los equipos de producción de frío, de calor, de las cargas eléctricas y de iluminación.

La adaptación requiere además hacer un nuevo plan de instalaciones que se ajuste a los cambios constructivos hechos en el 2014, cuando el proyecto original se modificó para integrar medidas antisísmicas ante el riesgo de movimientos de tierras detectado. También, según explicó la DGA, se requerirá una adaptación de las superficies de determinados ámbitos no esenciales en el conjunto del hospital "a las necesidades reales de población".

Se ajustará así el programa funcional del proyecto original en las áreas de hospitalización, en el bloque quirúrgico y en urgencias.

La entrada en vigor en la legislación española de varias directivas europeas obliga a alcanzar una calificación energética al menos de tipo B en los edificios de la Administración que vayan a ponerse en servicio a partir del año 2018.