El Gobierno de Aragón persiste en la voluntad de acordar el toque de queda en Huesca, Barbastro, Monzon y Jaca por considerarla la medida más eficaz para frenar los contagios en este momento y preservar la salud de los habitantes de esos municipios y de la población en general. Por ese motivo, ha presentado este viernes una orden de la consejera de Sanidad, Sira Repollés, para su autorización/ratificación por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), a pesar de que este se pronunciara horas antes e inadmitiera la solicitud de limitar la movilidad nocturna de las localidades oscenses. En resumen, se ha lavado las manos al afirmar que solo se pronunciará una vez la orden esté adoptada. Sin embargo, ahora vuelve a tener la pelota en su tejado. Hasta el miércoles tiene para dar una respuesta.
Desde Sanidad, además, se ha contactado con los servicios jurídicos del Ministerio de Sanidad, que convienen en la adecuación de esta decisión; así como con los alcaldes, que comparten la necesidad de tomar esta medida con carácter inmediato, según informaron fuentes del Ejecutivo, que consideran que en este momento de la pandemia «es la solución que menos afecciones genera en la economía».
Esta segunda petición responde al auto emitido a primera hora de la tarde por la sala de lo contencioso Administrativo de Tribunal Superior de Justicia de Aragón, que inadmitía la petición del director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón solicitando que se autorice la limitación de la movilidad en los municipios oscenses de Huesca, Jaca y Monzón.
En el auto, los magistrados de la sala señalan que la propuesta la formula un órgano «sin duda competente para hacerla, pero no ante esta sala que no es, conforme al artículo 10.8 de la LJCA (Ley reguladora de la Jurisdicción Contencioso Administrativa) la que debe adoptar lo solicitado, sino autorizar lo ya previamente adoptado». Es decir, que la adopción de medidas cuya autorización se solicita «incumbe» a la consejera de Sanidad como autoridad superior sanitaria. Esta, durante la rueda de prensa en la que se solicitó el visto bueno del TSJA, señaló que se trataba de una medida oportuna y no tomada «a la ligera» que pretendía «preservar la actividad económica y mitigar» el aumento de contagios.
Momentos antes de la decisión del Tribunal, el experto Enrique Cebrián, profesor en la Universidad de Zaragoza, intuyó que no se iba a aprobar la petición del Gobierno de Aragón porque, según la ley 3/2020 para el control de la pandemia que regulaba los confinamientos, «no era correcto que se autorizaran».
Incidencia al alza
La tasa de incidencia por 100.000 habitantes a 7 días vuelve a subir en Aragón, situándose en 450,3 casos (dos puntos más que ayer), siendo otra vez Jaca el municipio de más de 10.000 habitantes con una incidencia más alta, ya que sube hasta 1.607,1 (236 más que un día antes). También siguen los primeros en este negativo ránking Huesca, con 646,8; Monzón (606,8) y Barbastro (591,5), todas ellas con cifras superiores a las de un día anterior. Sanidad solicita el permiso de limitar la movilidad de 1.00 a 6.00 horas por tener una incidencia superior a 500 casos y transmisión comunitaria.
