Por fin se ha resuelto el proceso de licitación de los nuevos contratos que permitirán a diferentes empresas desplegar sus flotas de motos y bicis de alquiler por las calles de la ciudad. Tras un error en la redacción de los primeros pliegos hubo un retraso de varios meses en la concesión, pero el equipo de Gobierno de PP y Cs ha dado luz verde ya a su desembarco en la capital aragonesa. 

Así, serán las compañías Reby (la misma que ya tiene patinetes) y Idribik-Mobike (que ya ofrecía ahora ciclos de alquiler) las ganadoras del concurso en el apartado de bicicletas. La primera empresa desplegará un total de 840 vehículos y la segunda 1.250. El 20% de la flota deberá contar con un motor eléctrico de asistencia al pedaleo y, como novedad, deberán contar todas con un candado físico para anclarlas a los aparcamientos. Se pretende evitar así que las bicis se abandonen en mitad de las aceras, como ocurría hasta ahora. Si no están bien estacionadas el usuario no podrá dejar el vehículo. Además, contarán con cesta, ruedas antipinchazo y frenos no vandalizables. 

En el caso de las motos las ganadoras del concurso han sido también Reby y Mobilitas Futurus. Cada una desplegará 450 vehículos, que deberán ser totalmente eléctricos y no tener una antigüedad mayor de cuatro años. Deberán incorporar también dos cascos y gorros desechables. 

Las empresas, que deberán pagar un canon al consistorio para poder operar, tienen ahora un plazo de seis meses para sacar todos los vehículos comprometidos a la calle. 

Como hasta ahora, tanto las bicis como las motos funcionarán y se podrán alquilar mediante una aplicación móvil y la duración del contrato con el consistorio será de tres años con la opción de prorrogarse uno más.