Las farmacias aragonesas han vivido en los últimos días una avalancha de potenciales compradores de test de antígenos y en muchas ocasiones no han podido adquirirlos ya que estaban agotados. De hecho, en alguna, aseguran que este fin de semana «ha sido de locura», según ha explicado Manuel Arribas, jefe de compras de la farmacia Artal de Zaragoza. En Zaragozafarma también han vivido un aumento de ventas «exagerado y estamos desabastecidos».

«Hay muy pocos y se están acabando a marchas forzadas porque está subiendo la demanda de forma exponencial», afirma Raquel García, la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, quien reconoce que no tenían «tanto estoc ante tanta demanda» y en muchas ocasiones tampoco desde las boticas se pueden comprar a los laboratorios.

La semana del 7 al 13 de diciembre se vendieron en Aragón un total de 62.195 test de antígenos, más de 7.000 más que una semana antes (54.908), según un estudio de la consultora IQVA, situando a la comunidad en octava posición en cuanto a dispensación de pruebas. Ya en este informe se afirma que el estoc existente no cubriría la demanda de la semana del 14 al 20 de diciembre si se mantuviera el nivel de venta, que parece ser que se va a cumplir, porque las reservas no van a crecer.

«Estamos todos pendientes» de si se reciben más test y si lo hacen «desaparecerán», explica García, quien asegura que uno de los laboratorios distribuirá sus envíos los días 27 de diciembre y 3 de enero, pero «solo al que ya lo tuviera reservado».

La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza tiene claro de que realizarse una prueba «es un ejercicio de responsabilidad» para «comprobar cómo está el estado de salud» de cada uno para ver si es necesario estar o no con mascarilla durante estos días de celebración. «Es lo que venimos diciendo desde hace dos años» y más desde que las farmacias pueden vender estas pruebas, de forma libre, sin recta, desde el pasado mes de julio. A esto se suma que «están subiendo los casos y hay que controlar más la salud». El problema es que «nos ha pillado de improviso» el aumento tan desatado de ventas, que puede evitar la transmisión del virus. Por eso, insiste en medidas como la ventilación y la mascarilla en interiores; y si se puede, realizarse un test antes de la celebración y después.

Desde Zaragozafarma también insisten en que se acercan fechas de reuniones familiares y permite «ir con más tranquilidad». Una opinión que no comparte Manuel Arribas, de farmacia Artal, quienes tenían una provisión de un mes y medio y este fin de semana han agotado existencias. «Es un desabastecimiento irreal, ya que no es un producto de primera necesidad», explica, y añade: «Sin test de antígenos hemos vivido siempre. No es algo necesario y además tenemos unos centros de salud maravillosos», que es donde hay que acudir «si se tienen síntomas» o se ha estado en contacto con un positivo».

Es por eso que asegura que los test aportan «una falsa seguridad» ya que solo muestran que «ahora no contagio, pero quizá dentro de tres días sí». De ahí que insista en medidas como «la mascarilla, la higiene personal y la distancia social». Con todo ello y con «cuidado», se puede «llevar una vida más o menos normal», concluye.