Suena el teléfono del centro de salud pero nadie lo coge y el que llama se impacienta. Es una situación real pero inevitable. «Hay una sobrecarga en admisión» porque si una persona está haciendo una fotocopia «no puede coger el teléfono», cuenta Carmen Lorente, coordinadora de Enfermería del centro de salud de Tauste (el del propio coordinador del ambulatorio está de baja por covid). La situación desde Navidad ha sido «complicada», ya que han tenido que hacer más de 100 PCR al día; ahora los fines de semana ya no hacen porque «veníamos de forma voluntaria». Desde inicios de año 58 niños de entre 5 y 11 años han dado positivo «y solo estamos a 12 de enero», cuenta. También han tenido que atender bajas y otras patologías; y cubrir a los compañeros enfermos, controlar los brotes en las residencias, etc. En el centro de salud atienden a cerca de 10.000 personas de Tauste, Novillas, Pradilla de Ebro, Sancho Abarca y Santa Engracia en la provincia de Zaragoza. Llevan más de un mes con un administrativo a media jornada y les prometieron un refuerzo que «no ha llegado», por eso se sienten «totalmente abandonados por parte de la dirección del sector 3» que ni siquiera «nos ha llamado a ver cómo íbamos». Tauste es uno de los municipios con mayor incidencia por coronavirus (289 casos por cada cien mil habitantes) y casi 2.000 han contraído el virus desde el inicio de la pandemia, pero Lorente no sabe el por qué. Quizá porque «no se ha dejado de rastrear. Si se busca se encuentra», dice.

Utrillas. Concentración justo antes de Navidad. | SERVICIO ESPECIAL

Reconoce que «la gente se enfada mucho, hay un gran nivel de agresividad», señala; y eso que afirma que «en Tauste no hay demora; ningún niño ni adulto se queda sin atender» en el día.

Esta situación de saturación es extensible a otras localidades con alto número de contagios como Grañén (el municipio con más incidencia), Monzón (se ha pedido a los pacientes que todas las consultas sean telefónicas), Casetas (donde por la noche de las urgencias se ocupa el 061 por falta de personal), Pina de Ebro, donde su médico se ha hecho cargo de 2.500 pacientes al estar un compañero de baja o hacer dos o tres guardias sin libranzas; o en Cretas, donde un día se ha atendido al 10% de la población. O en Utrillas, donde el Movimiento de Acción rural había convocado una concentración el sábado para salvar la Atención Primaria, suspendida por el incremento de contagios. Denuncian la carga de trabajo y la importante falta de refuerzos.