¿En qué momento se encuentra El Burgo de Ebro?

En un momento de optimismo positivo porque estamos negociando con empresas del sector de la construcción para reactivar las zonas residenciales que tenemos vacías y con nuevas compañías que están interesadas en instalarse en los polígonos. El Burgo de Ebro está preparada para asentar más tejido industrial y para que su población crezca de manera exponencial. También mantenemos conversaciones con el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón para ampliar los estudios hasta Secundaria y esperamos que con Sanidad lleguemos a acuerdos para poder mejorar la atención primaria en el consultorio.

¿A cuánto asciende el presupuesto y a qué se destina?

El presupuesto es de 3,9 millones de euros. Casi 1,2 se destina a inversiones y hay partidas para el mantenimiento de edificios municipales, infraestructuras, parques y jardines y el yacimiento romano de La Cabañeta, o para servicios sociales y festejos. También hay ayudas a asociaciones culturales y deportivas y a las familias para la compra de libros y material escolar, becas de comedor y de movilidad para los alumnos que estudian fuera en institutos o en la universidad.

¿Qué ha supuesto poder disponer del remanente de tesorería?

Ha sido un salvavidas para muchos municipios y en El Burgo de Ebro un balón de oxígeno para el sector de la construcción porque hemos podido ejecutar obras muy demandadas por los vecinos que antes no podíamos realizar. Hemos dado un impulso tremendo a este sector y a otros que dependen de él. El problema es que con la guerra en Ucrania y la subida de los carburantes y materias primas los precios en las infraestructuras se están disparando y muchos municipios barajamos esperar para ver si la situación económica mejora. No podemos realizar obras que al final supongan un precio entre un 50 y 100% más caro. Esto puede repercutir en las empresas ya que los ayuntamientos no podemos asumir esos desfases.

¿Qué plazos hay para ejecutar estos proyectos que van con retraso o salen más costosos?

Dependerá de los contratos. La Diputación de Zaragoza, por ejemplo, ha ampliado con muy buen criterio el plazo de obras del PLUS 2021 de julio a octubre, pero en las actuaciones de inversión propia hay que estudiar cómo son los contratos y si hay posibilidad de retrasar las fechas de finalización de los trabajos. Vamos a ver qué pasa porque no se puede acometer una obra que se vaya más de 50.000 y 60.000 euros de lo presupuestado. Los gobiernos central y autonómico sí están permitiendo prorrogar algunas actuaciones, pero no en obras que estaban licitadas anteriormente.

¿Qué potencial tiene El Burgo?

Contamos con grandes empresas en nuestro término municipal donde trabajan muchos vecinos. El Burgo de Ebro ofrece, además, la tranquilidad de un pueblo con todos los servicios de una ciudad y su proximidad a Zaragoza. Vivir a 12 kilómetros de la quinta ciudad de España y en un entorno medioambiental con la reserva natural de los sotos y galachos es un privilegio. Estamos muy bien conectados, pero falta que se desarrolle el eje viario hasta el Mediterráneo. Las mejoras en las comunicaciones permiten que los polígonos estén mejor conectados y generen riqueza a toda la comarca, ya que estas empresas dan empleo a los vecinos de otros municipios de la Ribera Baja del Ebro.

¿Cómo ha sido el crecimiento demográfico en los últimos años?

Lento pero controlado y progresivo. Prefiero que el crecimiento sea sostenido para que podamos ofrecer todos los servicios a toda la población. Si viniera a vivir de golpe una gran cantidad de personas, como ayuntamiento nos veríamos desbordados para conseguir que todos tuviesen los mismos servicios. Por desgracia tenemos mucha gente que vive en el municipio pero no está empadronada, entre otras razones por estar a escasos kilómetros de Zaragoza. El Burgo de Ebro crea más puestos de trabajo en su término municipal, de 3.000 a 3.500, que vecinos tiene. Hay unos 2.550 habitantes censados.

¿Cómo es la apuesta municipal en el ámbito de la vivienda?

La vivienda de protección oficial ha quedado en un segundo plano porque su precio ya es similar al de la vivienda libre. Esto hace que haya menos VPO. Nos hemos puesto en contacto con empresas de la construcción para desarrollar las parcelas residenciales que hay en El Burgo de Ebro. En el momento que se construya una primera fase aumentará la demanda porque hay personas que están interesadas en venir a vivir aquí y que ya están preguntando en el ayuntamiento. Vamos a intentar facilitar las condiciones y ayudar a las empresas en la promoción de las viviendas. También de cara al próximo presupuesto queremos poner en marcha un plan de ayudas dirigido a los jóvenes.

Casi el 14% del término municipal es suelo industrial. ¿Cómo ha sido el desarrollo empresarial?

Comenzó con el asentamiento de varias empresas en Royo Cabezón antes de que se hiciesen los planes generales de ordenación urbana, pero el primer polígono industrial que se puso en marcha en El Burgo fue La Noria-El Vadillo. La instalación del grupo aragonés Saica supuso un salto en el desarrollo industrial, que se reforzó después con la llegada de Tronchetti. Alrededor del polígono El Espartal se han instalado pequeñas y grandes empresas, una gasolinera, restaurantes y un lavado de camiones. La última gran compañía que se va a implantar es Amazon Web Services (AWS).

¿Qué va a suponer la llegada de Amazon Web Services?

La multinacional ocupará una parcela de 153.000 metros cuadrados en el polígono El Espartal y su llegada supondrá poner a El Burgo de Ebro en el mapa junto a ciudades como Milán, Stuttgart, Seattle…, que cuentan con este tipo de complejos. Llega con una normativa del Gobierno de Aragón que por el momento no ha supuesto ningún ingreso para el ayuntamiento, pero lo más importante es que una firma como Amazon se va a instalar aquí y demandará unos puestos de trabajo muy cualificados. Para un municipio como El Burgo cualificación y diversificación es un factor muy interesante.

Todo apunta que AWS no tiene previsto crear muchos empleos pero su instalación sí podría animar a que lleguen otras compañías. ¿Qué previsión manejan?

Ya hemos recibido llamadas de empresas que quieren venir; no te dicen directamente que están relacionadas con Amazon pero se intuye. Tenemos negociaciones ya avanzadas con diversas compañías nacionales relacionadas con este sector y con otros, como el logístico o las energías renovables, pero que a día de hoy no podemos adelantar nada.

¿Van a ampliar los polígonos y zonas industriales de la localidad?

Si no es en esta legislatura tendrá que ser en la siguiente ya que las previsiones que manejamos desde el ayuntamiento son buenas y habrá que ampliar la superficie industrial para acoger la demanda de empresas. En el Espartal I queda muy poco terreno libre y en El Espartal II está prácticamente vendida toda la superficie a empresas que tienen su espacio reservado. Suelo y Vivienda de Aragón dispone de una pequeña parcela, pero en este último polígono queda aún pendiente una posible ampliación de suelo industrial sin consolidar.

¿Qué necesidades tienen hoy?

En el ámbito sanitario seguimos solicitando un pediatra y un segundo médico para una población del tamaño de El Burgo de Ebro. Esperamos que Salud atienda nuestra demanda porque esta situación puede conllevar un colapso total. En educación contamos con dos vías de Infantil y Primaria y desde el ayuntamiento vemos necesaria la ampliación de la etapa educativa hasta la ESO. El Gobierno de Aragón ya tiene nuestra propuesta encima de la mesa y esperemos que mueva ficha. Por otra parte, aunque en unos días se va a inaugurar un supermercado, debemos trabajar con el comercio porque es un sector que sufre la cercanía de Zaragoza.

¿Tiene previsto el ayuntamiento construir algún equipamiento?

El Burgo de Ebro tiene cubierta la demanda deportiva y cultural. Acabamos de inaugurar el pabellón multiusos y estamos construyendo el pabellón de juventud con cargo al remanente. También hemos llevado a cabo la renovación de la mayoría de parques del municipio y la construcción de un parque de aventura nuevo.

¿Cómo se presenta el futuro?

El futuro en El Burgo de Ebro es esperanzador y soy optimista. Está siendo una legislatura muy complicada debido a la pandemia, pero también muy fructífera. Vamos a seguir trabajando mucho y en función de si las demandas y negociaciones en materia de educación y sanidad avanzan cambiaremos la hoja de ruta hacia unos u otros proyectos e inversiones que son necesarios.