Un “simpa” que no queda impune. El Juzgado de Instrucción número 11 de Zaragoza ha condenado al pago de una multa de 540 euros a Agustí Fossas i Añaños por no pagar una carrera de taxi por valor de 17,10 euros y tampoco una consumición en un VIPS de la capital aragonesa que ascendía a 6,10 euros. El acusado deberá asimismo abonar esas cantidades a los perjudicados, una taxista y el establecimiento hostelero.
Los hechos se produjeron el pasado 28 de agosto. Agustí Fossas i Añaños tomó ese día un taxi, junto a una mujer que le acompañaba, en la avenida César Augusto. Pidió que les llevara al VIPS de la plaza Aragón y una vez allí le dijo a la conductora que esperara un tiempo porque había quedado con un amigo en el citado local.
Se apeó del vehículo y pasaba el tiempo y no volvía, mientras que su acompañante igualmente se apeó del taxi. Por ello la taxista se dirigió al establecimiento comercial y pidió a su cliente que abonara la carrera, de 17,10 euros, a lo que este se negó. Del mismo modo, el acusado tampoco abonó la consumición en el local hostelero, por un importe de 6,10 euros.
El magistrado encargado del caso, que ha sido visto en juicio rápido, considera que el imputado cometió un delito leve y continuado de estafa, por lo que le impone una pena de multa de tres meses a razón de una cuota diaria de seis euros. En caso de impago, el autor del “simpa” será privado de un día de libertad por cada dos cuotas no satisfechas. Además, deberá abonar las costas procesales.
El abogado Marco Antonio Navarro prestó asistencia jurídica al sospechoso, pero declinó realizar declaraciones sobre el caso.
