Turismo

Teruel sufre más de un 15% de cancelaciones para Semana Santa debido al mal tiempo

También se han frenado las esperadas reservas de última hora, lo que complica el lleno tanto en la provincia bajoragonesa como en el resto de la comunidad

Imagen de archivo de una procesión de Semana Santa en Teruel

Imagen de archivo de una procesión de Semana Santa en Teruel / Antonio García / EFE

Arturo Pola

Arturo Pola

El mal tiempo en el inicio de la Semana Santa, sumado a los poco esperanzadores pronósticos, está creando dudas en los turistas que ya habían hecho sus reservas para este puente festivo y está echando para atrás a los que estaban esperando a última hora para decidirse.

Teruel, la provincia aragonesa en la que con más intensidad se vive la Semana Santa, ha visto como entre un 15% y un 20% de sus reservas han sido canceladas. Así lo confirma Roche Murciano, residente de la Asociación Provincial de Empresarios Turísticos de Teruel, que lamentó la «mala suerte» que van a tener con el tiempo. «Es una pena porque es uno de nuestros máximos picos del año y son visitas que necesitamos. Teníamos el lleno prácticamente garantizado y ahora veremos. Va a seguir habiendo mucha gente, pero desde luego que se nos va a notar mucho», afirma el empresario.

Donde menos se notan esas anulaciones es en el Bajo Aragón, donde la devoción va a poder con la climatología y, aun habiendo cancelaciones, se espera un gran ambiente. «Es ahí, en pueblos como Andorra o Calanda donde se están manteniendo la mayoría de reservas, aunque haya riesgo de que algunas procesiones no salgan o algún acto se tenga que suspender», valora Murciano.

Aun así, el turolense insiste en las consecuencias que puede tener el frío y la lluvia. «Ya no es solo a nivel de alojamientos, el sol anima a salir a la calle, a pasear, a comprar más y a comer y cenar fuera de casa», resalta.

Menos sobresaltos están teniendo en el Pirineo (menos ligado a las tradiciones de Semana Santa) y sus hoteles no están sufriendo demasiadas cancelaciones. Eso sí, los empresarios de la zona aseguran que las reservas se han frenado y durante los días festivos rondaran una ocupación del 80%.