La siniestralidad laboral se convirtió en triste protagonista durante la jornada de este martes tras el fallecimiento de tres trabajadores en varios accidentes registrados en la provincia de Huesca. Un empleado del sector agrícola, un hombre que realizaba tareas de poda de árboles y otro que llevaba a cabo su jornada laboral en una estación de esquí aragonesa han sido las víctimas de una de las mayores lacras que sufre el mercado laboral. 

El primero de los siniestros tuvo lugar en el término municipal de Morillas, (Huesca), donde un trabajador de 23 años falleció tras verse atrapado por un tractor mientras realizaba una maniobra. Por el momento, se desconocen las causas del accidente a la espera de la investigación pertinente que llevará a cabo la Inspección de Trabajo. Sin embargo, desde UGT subrayan la necesidad de recordar que este tipo de trabajos requieren de unas tareas previas de formación en prevención de riesgos laborales, que resultan «imprescindibles» para proteger la salud y la seguridad, así como supervisar el estado de la maquinaría que se utiliza, que tiene que cumplir con la normativa vigente. Al parecer, el hombre que conducía el vehículo golpeó al joven trabajador que finalmente falleció.

El segundo trabajador fallecido realizaba tareas de poda de árboles en el municipio oscense de La Puebla de Castro. En este caso fue un compañero suyo el que se encontró el cadáver y dio la voz de alarma. Las circunstancias del fallecimiento también están siendo investigadas por las autoridades competentes, según recordaron desde el sindicato UGT, que, no obstante, incide en que los trabajos de poda de árboles entrañan un elevado riesgo de caída en altura. Estas labores, señalan, «deben ser llevadas a cabo, al menos, por dos personas con la formación específica. Ello permitiría, en caso de accidente, dar aviso a las autoridades sanitarias». 

Finalmente, el tercero de los fallecidos en accidente laboral en la jornada de ayer se registraba en una estación de esquí aragonesa donde un trabajador perdió la vida como consecuencia de un infarto. UGT recuerda que esta está considerada la principal causa de muerte en el entorno laboral durante los últimos años. 

Accidentes al alza

Solo el pasado año fallecieron un total de 20 trabajadores en jornada laboral en la comunidad aragonesa. De ellos, siete se debieron a patologías no traumáticas, lo que representa un 35% de los totales.

La última vez que se registraron tres muertes en accidente laboral el mismo día en Aragón fue en julio del 2019 cuando varios empleados se introdujeron en un trujal de Bodegas Paniza para realizar tareas de mantenimiento. La acumulación de CO2 provocó un desenlace fatal

Los accidentes de trabajo siguen al alza en Aragón. Así, el número de accidentes laborales con baja en jornada de trabajo ha crecido en un 12,10% en lo que va de año, con una «senda imparable» en la industria y los servicios. En este último caso, destaca la elevada temporalidad y precariedad que sufren los trabajadores 

Asimismo, la siniestralidad laboral mortal en Aragón tampoco da tregua en la comunidad. Este tipo de accidentes han pasado de los 16 registrados en los diez primeros meses de 2020 a un total de 18 en el mismo periodo de este año. Además, siete de los 18 accidentes mortales en Aragón se producen por causas relacionadas con las patologías no traumáticas; siete se deben a las condiciones de trabajo y cuatro se producen por accidentes de tráfico. Por sectores, casi el 79,4% de los accidentes de trabajo se han producido en los sectores de industria y servicios.

Otro dato que es preocupante, según recuerda el sindicato UGT, es que el 77,77% de los accidentes mortales, tiene lugar en empresas de menos de 50 trabajadores, carentes de representante legal de los trabajadores y de planes preventivos. Por esta razón, el sindicato defiende la creación de la figura del delegado territorial de prevención de riesgos laborales en el marco de la Estrategia Española de la Seguridad y Salud en el Trabajo para estos casos.