Caso Abierto - El Periódico de Aragón

Caso Abierto - El Periódico de Aragón

SUCESOS EN ARAGÓN

Un guardia civil de Caspe afronta 9 años de cárcel por ayudar a un traficante

El agente falseó un acta que le dio a un delincuente para engañar a su proveedor. Habría conseguido ‘coca’ gratis por una operación de 10 kilos de marihuana

El Seprona interviene en Zaragoza más de una tonelada de pescado ilegal

Cocaína gratis a cambio de facilitarle una operación de marihuana de 10 kilos. Un trato que, según la investigación, alcanzó un agente del Seprona de la Guardia Civil destinado en el puesto de Caspe con un delincuente de la localidad. Le salió caro porque fue detenido, lleva apartado dos años del ejercicio de su cargo y ahora se va a sentar en el banquillo. Afronta nada menos que 9 años y tres meses de prisión como supuesto autor de un delito de falsedad documental, un delito contra la salud pública y otro por pertenencia a organización criminal.

Pero J. L. F. S. no estará solo ante la Justicia, sino que junto a él estarán otros cinco acusados de la trama que sorprendió a los vecinos del municipio zaragozano. Más aún por los detalles de la investigación que llevó a cabo el Grupo de Información de la Comandancia del instituto armado de Zaragoza.

Según las pesquisas, falsificó un acta de incautación de droga para ayudar a un amigo traficante a engañar a su proveedor y apropiarse de 10 kilos de marihuana para luego revenderla. A cambio, el agente ahora encausado habría conseguido que su amigo le suministrara cocaína de forma gratuita. Para llevar a cabo el fraude, el detenido utilizó uno de los ordenadores del cuartel de Caspe para crear el documento ficticio, al que luego estampó un sello oficial.

Los agentes no solo intervinieron el ordenador en el que se hizo dicha acta, sino que también hicieron lo propio con respecto os teléfonos móviles del agente y del traficante, un dominicano identificado como Y. I. D. B. al que se conoce como El Americano. De todo ello recabaron varias pruebas en contra del miembro del instituto benemérito. Una de ellas es que en el momento en el que se hizo dicha acta ad hoc de incautación en la oficina solo trabajaban dos agentes y el compañero de J. L. F. S. había sido trasladado solo tres días antes a La Coruña. Solo él tenía, por tanto las llaves de la oficina.

Pero las pesquisas fueron más allá y pudieron comprobar que el tampón con el membrete de la Guardia Civil empleado tenía una anomalía y justo estaba en su mesa. Además, el agente borró de su móvil las numerosas llamadas y mensajes que se había intercambiado esos días con el Americano.

Todo ello hizo que el guardia civil, defendido por el abogado Marco Antonio Navarro, se derrumbara y confesara. El resto de abogados personados, Carmen Sánchez Herrero y Juan Carlos Macarrón, entre otros, piden la absolución. 

Compartir el artículo

stats