Oficios ya desaparecidos como los barquilleros o los afiladores albaceteños que vendían sus cuchillos en la estación, cursos de mecanografía, telefonistas; otros que han evolucionado como los bares o las joyerías; y algunos nuevos, como las agencias de publicidad, de despedidas de solteros, navieras, escuelas de baile o tatuadores. Todo tiene cabida en las Páginas Amarillas y en la exposición fotográfica organizada por Yell Publicidad con motivo del 40 aniversario de su primera publicación, que puede verse en el Museo Pablo Gargallo hasta el 29 de enero.

Las imágenes, todas ellas de gran calidad artística, reflejan los usos sociales, la ascendencia de nuevas profesiones, de modo que la evolución laboral, el cambio social y la evolución estética producida en España desde 1976 hasta la actualidad, se muestran en esta exposición de 76 fotografías de 46 autores, entre los que se encuentran Francesc Catalá-Roca, Xavier Miserach, Ouka Leele, Isabel Muñoz, Alberto Schommer, Outumuro o Fernando Manso.

Para Luca Finotto, director de Publicidad de Yell, se trata de "reflejar la sociedad y como ha cambiado", a través de los nuevos emprendedores, porque todo está en las páginas amarillas.

Además, se ha editado un catálogo, un vídeo, en el que se recuerdan campañas de publicidad de esta páginas, donde aparecían grandes actores como Tip y Coll o Alfredo Landa; y un documento audiovisual, elaborado por José Luis López Linares, que recoge el testimonio de seis emprendedores, que narran sus particulares experiencias: se trata de un joven catalán que hereda una empresa familiar de maquetas, un madrileño que produce en 3D; un valenciano que lleva carruajes; un gallego importador de pescado; y una chica que creó un gimnasio de pilates.

No hay ningun autor aragonés, ni fotografías de Aragón, aunque sí referencias, como la imagen de la línea de Alta Tensión entre Zaragoza y Barcelona; los bedeles del Museo Sorolla, que posan delante de dos cuadros donde aparecen unas ansotanas; o un tatuador en el Raval, que expone a Kikí de Montparnasse, a la que Gargallo, también esculpió y que ahora comparten escenario.