Mercedes Mígel Carpio, conocida artísticamente como Vega, acaba de publicar su décimo disco de estudio (Mirlo blanco) tras dos décadas de carrera. A base de esfuerzo y constancia, quizá más que el resto de músicos por el mero hecho de haber participado en Operación Triunfo, la andaluza ha alcanzado el respeto y el aplauso dentro y fuera de la industria. Además de liderar su proyecto en solitario, compone para otros artistas como David Bisbal, Pastora Soler o Raphael. Este miércoles a las 18.00 horas aterriza en formato acústico en la Fnac plaza de España (con inscripción obligatoria) y el próximo 29 de abril presentará en la sala López con toda la banda su nuevo disco, en el que se desnuda como nunca.

¿Es este su disco más personal?

No hay una intención de que sea el más personal, pero sí que es cierto que el grado de exposición personal es más alto. De forma inconsciente, el más elevado de todos los que he grabado. También influye que la primera canción que compuse para el álbum, Mirlo Blanco, tiene una carga de exposición bastante alta y eso quizá determinó de alguna forma al resto. Además, no hay que olvidar que más de la mitad de los temas están compuestos ya durante la pandemia y eso también ha influido.

En la presentación del álbum escribe: ‘Vega ha cantado el disco de Mercedes más convencida que nunca de que es un placer ser idénticas y reconocerse las dos frente a un espejo’. ¿En otros discos no se reconocían tanto?

Bueno, al principio de tu carrera sabes lo que no quieres pero lo que quieres lo vas perfilando a base de hacer más discos. En todo ese proceso ha habido una pequeña lucha entre la persona y la intérprete. Entre lo que yo quería realmente y las expectativas que tenía como artista, con dudas como qué tipo de sonido quería tener o a qué publico quería llegar. Me imagino que en eso también influyó mi formación como publicista. Viví ese momento de lucha hasta que me di cuenta de que yo no era feliz y comprendí que para que esto funcionara Mercedes tiene que ser más importante que Vega. Aunque es inevitable que tus propias expectativas te influyan de una u otra manera.

¿De qué ha querido hablar en el disco? ¿Qué temáticas aborda?

Por primera vez he abordado de forma más notoria temáticas quizá más sociales y por lo tanto tienen una postura manifiesta de lo que me agrada o no me agrada. De mi percepción de lo que funciona bien o no a nivel social. En todo esto también ha influido la pandemia. Algo que es lógico, porque la crisis sanitaria ha cambiado nuestras prioridades y nos ha hecho sentir más vulnerables.

Hay temas como ‘Un golpe’ que son un canto a la vida.

Sí, es aceptación de lo que ha pasado con esto de la pandemia, pero como dices al final es un canto a la vida. Sentirnos afortunados de seguir aquí y tirar para delante. Al final el disco es como un viaje emocional a lo largo de mi vida desde la perspectiva actual. 

En algunos temas echa la vista atrás. Por ejemplo, en ‘Mirlo Blanco’ canta: ‘Me sacaron las plumas a tiras’. ¿A quiénes se refería?

A la industria, que es muy descarnada y especialmente complicada si eres mujer. Además, cada vez está más regida por los likes y los clics. Se está creando una forma de consumir música que es estresante para los músicos, al menos para los de la vieja escuela.

¿Decidió crear su propio sello discográfico para huir de esa industria?

Crear mi propio sello es la forma de seguir haciendo música como yo quería, reafirmándome en mis principios como persona y como mujer. Pero sí, montar el sello fue una respuesta. Si quería seguir haciendo música tenía que ser así porque lo otro no lo soportaba.

¿Le costó más obtener el respeto dentro y fuera de la profesión por haberse dado a conocer en ‘Operación Triunfo’?

Volcar toda la mochila de responsabilidad en el formato es injusto, pero es evidente que no se nos ha tratado como al resto. Sobre todo por no dar si quiera la oportunidad de escuchar. 

En ese programa coincidió con Manuel Carrasco, que acaba de colaborar en un tema del disco.

Sí, en Contigo. Somos muy amigos y ya teníamos ganas de hacer algo juntos. Sé que a nivel mediático es un artista enorme, pero yo simplemente estoy cantando con mi amigo. 

Hábleme de su faceta como compositora para otros artistas.

Me ha aportado muchas gratificaciones. Ponerme en la piel de otro a la hora de componer es muy interesante. Además de que me ha dado un sustento más para mantener mi carrera en solitario. 

En ‘Patria’ lanza guiños al rock andaluz, ‘Un golpe’ suena más indie...¿Buscaba que el disco fuera diverso en cuanto a sonoridades?

Nunca busco un palo en una canción, me da igual el género. Solo busco que el tema mueva al que lo escucha, intentando tener un sello propio.  

El disco se grabó en cinta. ¿Por qué esa apuesta por lo analógico?

Queríamos grabarlo en directo y que tuviera ese sabor de los discos de antes. Al final, lo que buscábamos era sonar en el álbum lo más parecido a como lo hacemos encima de un escenario. 

¿Cómo le trata Zaragoza?

Siempre me han recibido con mucho cariño y además tengo una parte emocional especial con la ciudad. Tengo una gran amiga que es de Utebo, luego está mi admiración por Eva Amaral...hay diferentes factores que me vinculan especialmente con esta ciudad.