Ala selección española le bastó ayer una primera toma de contacto con Noruega para saber lo que le espera mañana (19.30 horas) en Oslo: una temperatura de un grado bajo cero y un ambiente muy caldeado después de que Ronny Johnsen, defensa del Aston Villa, hiciera una petición especial ("que nuestros seguidores traigan al campo piedras pequeñas, huevos y tomates") para vengar las naranjas y los vasos que les lanzaron en Mestalla.

Noruega no se lo pondrá fácil a España. El seleccionador, Nils Johan Semb, ya ha anunciado que su equipo, al que le basta un 1-0 para clasificarse para la Eurocopa, jugará a la defensiva esperando una oportunidad para sorprender a España a balón parado. "Me gustaría que pudiéramos dominar el partido, pero sólo los grandes equipos como España pueden hacer eso, así que debemos esperarlos y tener paciencia. La oportunidad puede que no llegue hasta el minuto 84", aseguró Semb. El técnico espera que el frío les eche una mano. Un elemento que no asusta a España.

LOS JUGADORES, IRONICOS Joaquín, tan acostumbrado al sol de Sevilla, fue el encargado de bromear sobre los cero grados que les esperan. "Yo no estoy acostumbrado al frío, y menos al de allí, pero me pongo caliente en cinco minutos. Además, jugar como ellos lo hacen merece una multa. Yo no podría jugar con ese estilo". El extremo del Betis ironizaba así sobre el temor que representa la meteorología que España se encontrará en Oslo, adonde llegó poco antes de las ocho de la tarde.

La adaptación a unas condiciones ambientales radicalmente distintas a las de Valencia --unos 20 grados menos-- no tiene por qué suponer un problema insuperable. Lo dice Iñaki Sáez como técnico y lo reafirman los médicos, que prevén una buena aclimatación, pese a que España sólo celebrará una sesión de entrenamiento, hoy a las siete de la tarde en el escenario del partido.

CAMPO CON CALEFACCION Los noruegos, por cierto, lo harán a las once de la mañana, lo que ha levantado suspicacias en la delegación española. Se piensa que después de su sesión pueden desconectar la calefacción que mantiene el césped en buenas condiciones. "He llamado al jefe del campo de Ullevaal para pedirle que riegue el césped y desenchufe la calefacción que hay debajo", ironizó ayer Semb en el diario Aftenposten. Pero algo no cuadra. No es normal que se entrenen sobre una superficie con características distintas a las que tendrá el terreno donde se disputará el choque. Además, tampoco es habitual que en Noruega se juegue con el campo helado. Sea como sea, Iñaki Sáez relativiza el asunto. "Claro que me preocupa el hielo y el frío, pero son temas que llevamos preparados desde aquí. Las condiciones serán iguales para los dos. Quizás ellos tengan más experiencia en trabajar en ese tipo de terreno, pero en España también nos nieva de vez en cuando", comentó el técnico vasco.

Eso sí, a los jugadores se les avisó con tiempo de que echasen en la maleta botas con tacos especiales para campos helados y ninguno se ha despistado. El resto de material para combatir el frío --calentadores, camisetas térmicas, gorros, guantes y vaselina-- lo pone la federación. Tanto los médicos como los fisioterapeutas restan trascendencia a la influencia que pueda tener una temperatura bajo cero en el rendimiento de los jugadores. En cuanto a la alimentación, la dieta variará poco. Sopas y platos calientes, además de las ensaladas y las proteínas e hidratos de carbono habituales.