El central del Barcelona Gerard Piqué, que no jugó este sábado contra el Real Madrid en Valdebebas (2-1), saltó al campo nada mas acabar el partido para protestar al árbitro por haber descontado solo cuatro minutos. El azulgrana fue amonestado con tarjeta amarilla, según se reflejó después en el acta.

Pese a los intentos del delegado azulgrana, Carles Naval, por impedirlo, Gerard Piqué, muy enfadado, abordó a Gil Manzano para mostrar su desacuerdo por entender que tuvo que alargar más el partido por el tiempo que el colegiado invirtió en solucionar unos problemas con el intercomunicador.

Antes, al intercambiar saludos con los jugadores madridistas en el césped y al encontrarse con el croata Luka Modric, este le afeó su conducta. "A rajar ahora, ¿eh?", el espetó el madridista al azulgrana al cruzarse con él. "¡Pero cuántos minutos quieres!", añadió, ante la sorpresa de Piqué.